La fotografía como afición y otras artes visuales

CARLOSCARRETER.ES

Home / Essays / blanco y negro

Más Polaroid blanco y negro, buenos resultado, con alguna subexposición

Hace casi dos años opté por hacerme con una cámara Fujifilm Instax para el formato Square. Es decir, formato de imagen cuadrado, con un tamaño de imagen de 62 x 62 mm sobre una hoja de 72 x 86 mm. A priori, siempre me ha parecido preferible las Polaroid, con un tamaño de imagen de 79 x 79 mm sobre una hoja de 88 x 107 mm. Es, en números redondos, un 60 % más grande en superficie que las Instax Square. Y eso implica que reúne más información, con más detalle y más amplitud dinámica en los tonos. Pero la inmadurez de la emulsión de las actuales Polaroid en constante evolución frente a las Fujifilm, y su precio, considerando que sólo ofrece ocho fotos por cartucho frente a las diez de las Instax... me hicieron optar por estas últimas, aprovechando las ofertas de la Instax SQ6, hoy en día descatalogada, pero superior en prestaciones a la Instax SQ1 que la sustituyó.

Sin embargo, nunca he estado muy satisfecho con los resultados obtenidos con la Instax SQ1, descontando los efectos derivados de su tamaño más pequeño, que había asumido como un compromiso frente a las ventajas de su mayor madurez como emulsión y su precio más económico. La nitidez de las fotografías me parecía excesivamente escasa, especialmente comparando con los resultados que muestran otros usuarios. Y también está el problema de lo frecuente que es que se quemen las luces. He estado trabajando en ese tema... ya comentaré más adelante mis hallazgo. Aunque ya adelanto algo; muchas veces digo a compañeros aficionados a la fotografía que me comentan sus resultados flojos, "Antes de echarle la culpa al material... piensa en qué puede estar haciendo mal el fotógrafo". Y en eso, me tengo que incluir yo mismo.

La cuestión es que hay una serie de factores que han variado algo desde que compré la Instax SQ6. Primero, que las emulsiones de Polaroid han mejorado bastante en calidad y estabilidad. Especialmente, el blanco y negro. Es una lástima que ya no la hagan en formato Spectra, también conocido como Image System, puesto que las cámaras para ese formato tienen ópticas y prestaciones superiores; yo tengo una de esas, y lo he podido comprobar. Y en segundo lugar, estar al tanto de Amazon Warehouse, la sección del gigante de la venta por internet donde se venden productos de segunda mano o reacondicionados, me ha permitido comprar en los últimos tiempos película Polaroid a precios apreciablemente más asequibles. Muchas veces son devoluciones de usuarios que compran el formato equivocado de película, y luego se revenden los cartucho notablemente más baratos. Y otras circunstancias que no sé precisar, pero que suponen mejoras en el precio que son de agradecer.

Así pues, mientras he estado investigando qué hago o hacía mal con la Instax SQ6, en estos últimos meses he dado preferencia a la Polaroid SuperColor 635 y a los cartuchos de "segunda mano" de Polaroid Blanco y negro 600. Que tienen un tono estupendo. El último cartucho que hice ya ha ido apareciendo en mi cuenta de Instagram dedicada a la fotografía instantánea. Es decir, ya lo hice hace unas semanas. He de decir que algunas de las fotos estaban francamente subexpuestas. Probablemente porque estaban realizadas en un día muy nublado, lluvioso incluso, en rincones con poca luz, que superaban las limitaciones técnicas de la cámara a la hora de aceptar luz a través de su óptica. A pesar de la ISO 640 de la película, la apertura es f11 y desconozco cómo selecciona las velocidades de obturación, pero debe tener algún límite para evitar trepidaciones cuando se dispara sin flash (en situaciones donde este es inútil), aunque su tiempo de obturación máximo teórico sea de 1/4 segundo. Así que algunas fotos están arregladas en el ordenador tras ser escaneadas. Pero por lo demás, en estos momentos, esta Polaroid blanco y negro es una emulsión que me gusta.

Polaroid en blanco y negro; por la ciudad y en paisaje ferroviario

La verdad es que tengo bastantes rollos de película y otras cosas, también en el mundo de la fotografía digital, que comentar en estas páginas. Especialmente desde que me llegaron revelados los siete rollos de película del mes de enero que mandé a revelar a Carmencita Film Lab con el cambio de mes. Pero todo llegará. Como hoy no voy con mucho tiempo, voy un cartucho de fotografía instantánea reciente. Cambié a Fujifilm Instax hace algo menos de un par de años por el coste de la película Polaroid. En ocasiones es casi el doble por ocho fotos, mientras que las Instax ofrecen diez por cartucho. Pero claro, las fotos Instax son más chiquitas. Y por otro lado, la tecnología de Fujifilm está madura, las fotos se revelan pronto y tienen gran estabilidad en el tiempo... las de Polaroid...

Las Polaroid han mejorado mucho. Y el ejemplo lo ofrecen las fotos de este cartucho de fotos en blanco y negro. Todavía tardan en revelarse bastante más que las Instax, pero al final quedan unas fotos contrastadas, que por su mayor tamaño se ven mejor definidas y con más profundidad. El resultado es rotundamente más agradable. Y dicen que son más estables con el tiempo. Lo cierto es que el material sensible de la actual Polaroid ha ido mejorando bastante desde las últimas veces que lo usé.

Y luego está la cámara. La Polaroid SuperColor 635 es una cámara que tiene como poco 30 años. La heredé de una enajenación de material no usado por una administración pública. Todo en orden. Con el uso y algunos cuidados que le he prestado, las irregularidades en el revelado de cada foto, que aparecían con frecuencia cuando la empecé a usar, han desaparecido. Quedan bien. O la proporción de defectos ha disminuido muy considerablemente. Y aunque es más sencilla en sus opciones que la Instax SQ6, lo cierto es que no creo que la óptica sea peor. Yo veo unas fotos más nítidas y definidas. Mejores, claramente. Su principal problema, el de la cámara, es que no tiene modo de fotografía de proximidad, por lo que hay que situar como mínimo al sujeto a metro y medio de distancia. Y como casi todas las cámaras que están ajustadas a una hiperfocal, el paisaje lejano no aparece muy definido, están pensadas para fotografiar personas que están a unos metros de distancia. Es algo que hay que tener en cuenta al elegir los motivos para las fotos. La pena es que no hagan cartuchos para el formato Spectra, ya que mi cámara para ese formato es mucho mas nítida y configurable.

Bueno... hice este cartucho el sábado pasado. Fui a probar el adaptador Fringer EF-GFX, y de paso hice estas fotos. Cuatro de ellas, por el barrio, cuando me dirigía a la estación de Miraflores para coger el cercanías a Casetas. Las otras cuatro en los alrededores de la estación de Casetas. Y han quedado bien. Pero... ¿y el precio? Pues de vez en cuando miro en Amazon Warehouse los productos reacondicionados y encuentro ofertas de cartuchos que venden más baratos, producto de devoluciones de gente que se equivoca al pedirlos por la variedad de formatos que hay en el mercado. Por lo que su precio se acerca al de las Instax. Y entonces, aunque haya dos fotos menos, la calidad ofertada merece la pena. Seguiré. Recordad que publico mis fotos instantáneas en instagram.com/carlos.carreter.instant.

Año nuevo: la primeras fotos de 2022 - Fujifilm Instax SQ6 con Instax Monochrome

Pensaba que hoy tendría tiempo y ganas para redactar una entrada dedicada a la fotografía digital... pero ni he tenido tanto tiempo como el que pensaba, ni me encuentro inspirado para organizar mis pensamientos y exponer lo que quería decir de forma ordenada y no demasiado extensa. Así que voy a lo fácil. Voy a las primeras fotografías que hice en Año Nuevo, las primeras fotografías del año 2022. O por lo menos, una parte de ellas.

Sobre estas líneas se encuentran las primeras fotos que hice en 2022, instantáneas realizadas con la Fujifilm Instax SQ6 sobre película Instax Monochrome. Bueno... la primera. Creo que la segunda fue con la pequeña Fujifilm Finepix XF10, que tenía un tanto olvidada, y a la que estoy dando vida de nuevo. Fui haciendo fotos alternando las dos cámaras. Pero no me detendré mucho en las digitales. Pero os dejo alguna de las fotos de esa mañana.

Como podéis ver, niebla intensa y mucha humedad en el ambiente. La temperatura, no demasiado baja. Superior claramente a la de la niebla del día de Navidad. En cualquier caso, razón más que suficiente para preferir un cartucho de película monocroma. Aunque también tenía en reserva algunos cartuchos de color. Incluso Polaroids, tanto monocromos como en color... pero los dejaremos para otra ocasión.

En cuanto a las características de las tomas,... Considerando el escaso contraste que había en el ambiente, empecé haciendo las fotos en modo automático, sin ninguna corrección de la exposición. Las dos que están sobre estas líneas, realizadas con el modo de fotografía de aproximación (me sigue pareciendo una tremenda osadía que algunos le llamen "modo macro", dada la minúscula razón de reproducción que ofrece la cámara). Y como ya he comentado en otras ocasiones, no es posible ajustar al mismo tiempo este modo y la corrección de la exposición. Una de esas cosas que tiene Fujifilm, que siempre incluye alguna pejiguera en sus cámaras, por estupendas que sean o parezcan, que hace que te saque de quicio. En cualquier caso... a esas alturas ya había dado lugar a que las dos primeras fotos estuvieran totalmente reveladas... y no me convencía del todo el resultado.

Así que después de las dos fotos de aproximación, el resto del cartucho lo hice con el modo D de "dark", para compensar un poco a la baja y ofrecer un poco más de contraste y personalidad a la imagen. Salvo la foto de los tres árboles aislados. Que quise evitar un cielo oscurecido. Así que dejé la exposición automática. Con buen criterio.

Al llegar al parque Pignatelli, donde el extraño caballo, ya había terminado el cartucho. Y sólo me quedó visitar una curiosa exposición, donde se exponían las maquetas de las carrozas que actualmente salen en los festejos con cabalgata que a lo largo del año organiza el ayuntamiento de Zaragoza. Curiosa, como digo.

Último rollo de película de agosto - Olympus Pen F con Fujifilm Neopan 100 Acros II

Lo que son las cosas, estamos ya en el primer día de octubre y aun me queda por comentar un rollo que comencé en agosto y terminé el 1 de septiembre. Mi verano ha sido muy activo fotográficamente con la #CrappyCommieCameraParty, dedicada a la fotografía con cámaras (u otros equipamientos fotográficos en mi caso) fabricados en países comunistas. Pero aunque esta "fiesta" fotográfica estaba convocada entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, a finales de septiembre estaba cansado y empecé a usar otros equipos más agradecidos en su diseño y manejo. Y por ello, en los últimos días de agosto decidí sacar a pasear la estupenda Olympus Pen F con su Zuiko 38 mm f1,8 al que le puse un filtro amarillo de Hoya para mejorar el contraste de las fotografías en blanco y negro.

Como película opté por un rollo de Fujifilm Neopan 100 Acros II. Estando todavía en pleno verano, con bastante horas de luz y ambiente despejado, el no disponer de mayor reserva de sensibilidad no me pareció un problema. Y dado el reducido tamaño de los negativos de la Pen F, un poco por debajo de la mitad del habitual 24 x 36 mm, el grano casi imperceptible de esta película y su elevada nitidez hace que sea muy apropiada para usar con esta cámara. Para medir la luz, la Pen F no tiene fotómetro incorporado, usé mi fiel Gossen Digisix, perfectamente fiable.

La película la revelé con Kodak HC-110, que es mi revelador habitual. Ofrece buena calidad y gran permanencia con la botella abierta, no perdiendo eficacia con la inevitable oxidación al entrar en contacto con el aire. Pero con el cambio de fórmula de la Acros a esta su segunda versión, fabricada por Hartman (Ilford) para la marca japonesa bajo las especificaciones de esta, no siempre está claro cuales son los tiempos recomendados para el revelado con HC-110. Según donde consultes, los tiempos son similares, pero no la concentración propuesta por el revelador. En estos momentos, la que parece funcionar mejor es la dilución C 1+19, revelando durante 5 minutos a 20 ºC. La proponen en Digitaltruth y algún otro sitio. Pero por si os interesa, los hay quien propone la misma dilución durante 5 minutos y 30 segundos, e Ilford, que ofrece el Ilfotec HC, con la misma fórmula que el Kodak HC-110, da como recomendada la dilución B 1+31 durante esos mismos 5 minutos a 20 ºC. Parecería que esta sería la más apropiada, por ser Hartman (Ilford) el fabricante de la Acros... pero no me da los mismos resultados que la dilución C.

Una vez revelados los negativos, fueron digitalizados con la Panasonic Lumix G100 con el Leica DG Macro-Elmarit 45 mm f2,8 ASPH OIS, obteniendo unos ficheros que solo necesitaban el ajuste del punto negro y del punto blanco para obtener unos resultados adecuados, con imágenes nítidas y con un grano casi imperceptible. Aunque la digitalización con cámara digital siempre tiende a resaltar más el grano que los escáneres dedicados de película. Todo depende de cuán agresivo tenga que ser el ajuste posterior del contraste de la imagen.

En general, los resultados son buenos, confirmándose como una excelente combinación de cámara y película, especialmente gracias a las buenas calidades del objetivo estándar de la cámara. Siempre mejor con este diafragmado por lo menos a f5,6. Lo único que me gustaría es que se pudiese optar por rollos de 24 exposiciones, que para la Pen F se convertirían en prácticamente unas 50, ya que el rollo de 36 exposiciones, que ofrece unas 75 con la Pen F, se hace interminable.

Por Dinamarca con película en blanco y negro - Minox 35 GT-E con Ilford XP2 Super 400

Sinceramente, podría empezar esta entrada como lo hice hace unas semanas a propósito de mi viaje de vacaciones a Suiza, y replicarla casi al completo. Prácticamente, lo único que tendría que cambiar son las fotos de muestra. Como vengo haciendo desde hace unos años, decidí llevar en mi escapada danesa una cámara fotográfica para película tradicional, además del equipo digital. Como las fotografías del equipo digital, siempre en formato RAW, son por defecto en color, independientemente que luego se puedan trabajar en blanco y negro, la película fotográfica que me llevo es en blanco y negro. La que mejor resultado me viene dando desde hace tiempo es la Ilford XP2 Super 400, película negativa en blanco y negro que tiene la peculiaridad de que está basada en tecnologías similares a las películas negativas en color, y se revela en el proceso C-41 o equivalentes al igual que esta.

En esta ocasión no tuve dudas sobre qué cámara usar. Cuando planificamos el viaje, esta vez con más tiempo que a Suiza, pensaba que íbamos a transitar por caminos ya conocidos. Pero no me plantee llevarme el blanco y negro en película tradicional como cámara tradicional, porque tenía unas intenciones muy clara sobre las fotos que quería hacer en color digital. Así que la Minox GT-E, colgada del cinturón del pantalón, era la opción perfecta.

Al igual que sucedió con la Panasonic Lumix G100, convivió perfectamente con la Canon EOS RP. Que como ya conté fue la mayor parte del tiempo calzada con el RF 50 mm f1,8 STM. Así, mientras íbamos de un lugar a otro, una cámara con un 35 mm y otra con un 50 mm. Ambas focales tienen partidarios, que muchas veces discuten ardientemente sobre cuál es la mejor cuando sólo puedes o quieres llevar un objetivo fijo con una única longitud focal. Para mí... es indiferente. A lo que llevo un par de horas de viaje, ya me he acostumbrado a buscar sujetos apropiados a la focal que tengo disponible. Y no son exactamente las mismas con un 35 mm que con un 50 mm. En ocasiones, ha sido un 40 mm, que también funciona muy bien.

Como conté con el viaje a Suiza, fue usada preferentemente en exteriores, con valores de exposición que van desde el f11 y 1/500 segundo en tiempo plenamente soleado y los f5,6 y 1/60 segundo en situaciones de sombra densa, nublados profundos o luz crepuscular. En estos últimos casos, si me quedaba corto de exposición, podía subir a IE 400 u 800. Pero preferentemente he usado un IE 200. Con aperturas habituales en f5,6 y f11, es fácil enfocar por zonas con la escala de profundidad de campo. No hay ayuda al enfoque que es manual, por lo que siempre hay que estimar la distancia de enfoque. En algún caso me atreví a usar el f2,8 sin muchos problemas, para aislar el sujeto principal del fondo. Pero también me he atrevido con interiores. Teniendo cuidado al disparar, incluso a velocidades próximas al 1/30 segundo, no he tenido grandes problemas de fotos trepidadas.

Mis conclusiones son similares a las que llegué hace unas semanas. Estoy bastante satisfecho con los resultados. Como ya he dicho, la película Ilford XP2 Super 400 es una película polivalente que va muy bien para un todo uso. A IE 200 y con escenas bien iluminadas, tan apenas se aprecia el grano. Que se hace más evidente, pero no desagradable, en las sombras o en días más grises y nublados. En fin, espero que os gusten las fotos.