La fotografía como afición y otras artes visuales

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Recomendaciones semanales - del 28 de agosto al 4 de septiembre de 2016

En una semana en la que las noticias en el mundo de la fotografía han estado dominadas por el fallecimiento de Marc Riboud (1923 - 2016), ya nonagenario, no han faltado otras noticias o propuestas interesantes de las cuales he seleccionado aquellas que más me han llamado la atención, como de costumbre. Empezaremos, también como de costumbre, por revisar el tablero en Pinterest de la semana.

Durante mucho tiempo me he considerado un fotógrafo aficionado que se encontraba cómodo usando focales entre los 40 y 60 mm. Los objetivos estándar por excelencia, complementados con los teles cortos, a ser posible con ciertas posibilidades de fotografía de aproximación, más que macrofotografía. Sin embargo, en los últimos años vengo observando que mis focales de preferencia están disminuyendo, y en estos momentos se encuentran entre los 24 y los 40 mm. Los grandes angulares moderados, también complementados con teles cortos, como antes comentaba. Las longitudes focales a las que me refiero son las que corresponden al formato tradicional de 24 x 36 mm. En caso de utilizar otros formatos, pues las equivalentes. Por ejemplo, como uso con frecuenta cámaras micro cuatro tercios, las focales entre los 12 y los 20 mm. En Islandia utilicé la Olympus mju-II con película en blanco y negro. Y comprobé que un 35 mm no es necesariamente un objetivo demasiado largo para paisaje. Los paisajistas con frecuencia usan focales más cortas. Incluso mucho más cortas. Pero yo quedé contento. Suponiendo que en estos momentos el 35 mm se haya convertido en mi focal preferida, estos días atrás he llevado preferentemente conmigo la Leica ME con el Zeiss C-Biogon 35/2,8 T*. Ayer mismo los estuve usando para paisajes en los Pinares de Venecia de Zaragoza. De hay proceden las fotografías acompañantes de esta semana.

Como decía, la actualidad fotográfica ha estado marcada por el fallecimiento del ya nonagenario fotógrafo francés Marc Riboud. Francés, pero universal por vocación. Podemos considerarlo como uno de los testigos preferenciales, y más sensibles, de los principales acontecimientos históricos de la segunda mitad del siglo XX, con un alto nivel de compromiso personal. La primera noticia la recibí en el tumblelog Lightbox de la revista Time. Donde, cómo no, era ilustrada por la fotografía de "La fille à la fleur", la joven manifestante de 17 años que afronta una fila de soldados que la apuntan con sus bayonetas "armada" con una margarita en sus manos, para hacerles llegar su mensaje de paz. Pero no tardaron en llegar noticias desde diversos medios entre los cuales no podía faltar Magnum Photos, agencia de la que era miembro, L'Oeil de la Photographie, uno de los principales medios franceses en línea sobre fotografía, DigitalRev, que dejaron de hablar de chismes por un rato para hablar de fotografía, "sin que sirva de precedente",... Curiosamente, los medios nacionales especializados no parecieron muy interesados por el asunto... ¡¡¡??? Finalmente, aunque "La fille à la fleur" es su fotografía más conocida e icónica, siempre me he quedado prendado de su retrato de la actriz china Gong Li en 1993, que apareció en el tumblelog de Wyoh, un blog dedicado más al desnudo que otra cosa, pero que creo que supo tener una personalidad propia a la hora de elegir un par de fotos para homenajear a Riboud.

Entrando ya en la rutina de la recomendaciones semanales, comenzaremos por los más históricos de los fotógrafos. En la revista en línea South x Southeast, que recoge la cultura fotográfica del sur y sureste de los Estados Unidos, dedican un artículo a las mujeres nativas americanas y a sus creatividad, a través de la mirada y las fotografías de Edward S. Curtis. Curtis dedicó buena parte de su trabajo en las primeras décadas del siglo XX a inmortalizar la cultura evanescente de los nativos americanos. Muchos han alabado su trabajo, aunque otros le acusaron de incidir en los tópicos y en imágenes de estas culturas que ya no eran reales en esa época. Por ejemplo, los jefes indios con galas de guerreros en un momento en el que ya habían terminado por completo los conflictos armados entre los invasores europeos y los nativos norteamericanos. Quizá para desmentir esta crítica, tenemos estas fotografías que se centran en las mujeres, tradicionalmente ignoradas, en su artesanía, en sus obras artísticas, en su estética. Me parece una buena iniciativa.

Desde DSLR Magazine, unos de los medios españoles que parecen haber olvidado a Riboud, nos hablan sin embargo de una interesante fotógrafa alemana, de corta carrera, sólo estuvo en activo en los años 30, y que tuvo una fuerte actividad contra el nazismo. Se trata de Marianne Breslauer, creo que fue una elegante retratista, y que su obra merece la pena ser conocida.

Entramos ahora ya en el ámbito de propuestas contemporáneas, de distinta naturaleza. La denominada depresión endógena es una enfermedad mental de carácter grave, que produce importantes alteraciones en la persona que la padece y en su entorno familiar y social. En Feature Shoot nos hablan de cómo Maureen Drennan lidia con la enfermedad de su esposo a través de su trabajo como fotógrafa en la serie The Sea That Surrounds Us. La fotógrafa combina retratos de su marido o fotografías de él en su ambiente, en su hogar, con paisajes de la costa en la que ella pasó su infancia y que la representan a sí misma en la relación.

Uno de los blogs que sigo a través del lector de Wordpress, Proyecto FC, me traslada a la entrada que dedican en MekishikoShity a la fotógrafa y videoartista japonesa Miwa Yanagi. Esta fotógrafa mantiene a lo largo de su obra una continua reflexión sobre la concepción de la identidad femenina a través de diversas series de fotografía conceptual, que van desde la dedicada a las ascensoristas, a sus reinterpretaciones de los cuentos de hadas, mucho más crudas que las versiones infantiles que nos llegan en la actualidad, o a través de la imaginación de lo que serán muchas jóvenes de hoy en día cuando tengan 50 años.

Como nos cuentan SMBH Mag, otra fotógrafa que también está trabajando intensamente en representar la identidad femenina de las mujeres contemporáneas, especialmente las jóvenes, es la china Luo Yang. Trabajando con calma, a través de la fotografía en color con película tradicional, documenta la sexualidad, la actitud y el papel en la sociedad de jóvenes chinas, una generación que está cambiando a marchas forzadas los valores de las generaciones anteriores, incluso de una forma mucho más potente que sus coetáneos masculinos.

También desde SMBH Mag, nos hablan de la serie Getting Lost de Delaney Allen. Una serie de paisajes recogidos de las amplitudes del oeste de los Estados Unidos, en los que se quiere reflejar la sensación de soledad y de sentirse perdido del individuo, junto con una serie de fotografías de estudio de objetos, espejos y otros detalles, que quieren simbolizar este sentido de soledad. Particularmente, son los paisajes los que han llamado mi atención.

Esta semana he estado explorando también una revista en línea lituana que se escribe también en inglés, y que va presentando la obra de diversos fotógrafos y otros artistas virtuales contemporáneos, muchos de ellos poco conocidos por su juventud y por pertenecer a la escena artística de la Europa del Este. Se trata de FK Magazine, y destacaré algunos de los trabajos que me han llamado la atención.

Porfolio dedicado a Mariya Kozhanova, fotógrafa rusa de Kaliningrado que documenta el fenómeno del cosplay entre las jóvenes rusas de esta ciudad, en la que se mezclan las herencias culturales soviéticas y alemanas y en la que esta manifestación de la cultura japonesa sirve para poner en cuestión la identidad de esta generación.

Porfolio dedicado a Anastasiya Lazurenko, fotógrafa ucraniana que lidia con el fenómeno de la anorexia y de la imagen, la sexualidad y la intimidad de las mujeres que padecen esta enfermedad.

Porfolio dedicado a Igor Trepeshchenok, fotógrafo letón que se fija en una población costera del Báltico, que dependió durante décadas de una industria metalúrgica que se ha venido a pique en la sociedad postindustrial actual, dejando una sociedad y especialmente una juventud sin futuro y desnortada, como está pasando en muchas otras partes de Europa.

Me ha llamado especialmente un porfolio de la fotógrafa rusa Katia Repina. Con frecuencia, fotógrafos occidentales ponen su mirada en el negocio del sexo relacionado con las chicas y mujeres jóvenes de los países del este, tanto en lo que se refiere al comercio de mujeres como trabajadoras sexuales forzadas u otras variantes de la industria del sexo, como la pornografía. Pero en este caso es una fotógrafa rusa la que se fija en la vida de una actriz pornográfica española, haciendo hincapié en el hecho de que no es una trabajadora forzada que tampoco ha llegado a esta industria empujada por la necesidad, sino por voluntad propia.

También me ha parecido curioso el porfolio y entrevista dedicado a Natasha Caruana, fotógrafa inglesa basada en Londres, que habiendo mantenido una relación con un hombre casado, ha trabajado con la imagen, la vida o las historias de esas mujeres que son consideradas "la otra", fotografiando mujeres que se han encontrado o se encuentran en la misma situación, reflejando los aspectos de secreto y riesgo en estas relaciones. Tiene otra serie, tomada subrepticiamente con una cámara desechable, dedicada al "hombre casado e infiel", que lógicamente es complementaria. Fotógrafa que es capaz de usar desde este sencillo material hasta una cámara de gran formato para un mismo tema, adaptándose a las circunstancias del momento.

Por último, como los temas tratados en las recomendaciones de esta semana han sido bastante profundo, terminaremos en un tono más ligero. Nos dejaremos llevar por la nostalgia. Kodak hoy en día sigue en el panorama de la fotografía pero como una firma secundaria, que no es ni una pálida sombra de lo que fue. Pero en su momento fue uno de los números uno del sector, especialmente por la comercialización de película fotográfica y cinematográfica. También comercializaba cámaras. Muchas veces fabricadas por otros por encargo. En su mayor parte eran modelos muy sencillos, poco costosos, que animaban a la persona corriente, al no aficionado a la fotografía, a poseer una y a consumir película y copias fotográficas en su entorno doméstico y en sus vacaciones. También tuvo algunos modelos más sofisticados que merecen la atención del historiador de la fotografía, pero fueron los modelos básicos y sin complicaciones,, los que hacían la vida fácil a la persona corriente, los que más impulsaron y fabricaron. Y anunciaron. Os dejo con un par de vídeos de los años 50 y principios de los 60 con anuncios de cámaras y películas fotográficas Kodak, que reflejan además el ideal del estilo de vida norteamericano de la época.

Como nos dice Betty White, la de las chicas de oro, tras los pepinillos, el carrete de Kodacolor es el más importante ingrediente de cualquier fiesta familiar.

Recomendaciones semanales - del 29 de mayo al 5 de junio de 2016

Esta semana he estado realmente muy ocupado y no he recogido muchas recomendaciones, así que haremos una entrada de apaño. Por supuesto, como siempre empezaremos por el tablero de Pinterest de la semana. Que viene con un poco de todo.

En cuanto a las fotografías acompañantes... Salvo tres de ellas que están relacionadas con el primer artículo del que hablaré, y que están hechas con película tradicional Kodak ColorPlus 200 en una Pentax MX con un SMC Pentax-M 40 mm 1:2,8, el resto proceden de mi última adquisición para el sistema micro cuatro tercios. A ver. Me explicaré. No soy muy fan de la fotografía con teleobjetivos, más allá de un tele corto. Me suelo conformar con cualquier cosa que vaya entre los 70 mm y los 100 mm, hablando en términos del formato 24 x 36 mm, o sus equivalentes en otros formatos. En el sistema micro cuatro tercios estaríamos hablando en focales entre 35 mm y 50 mm. Más allá... la verdad es que los resultados, con pequeñas excepciones me suelen aburrir, siendo el territorio de la macrofotografía donde los encuentro más adecuados. Y tengo soluciones para ello. El caso es que en algún viaje me he llevado teleobjetivos de orígenes diversos con adaptadores. Yo viajo con cámaras micro cuatro tercios por su ligereza y discreción. Pero no deja de ser un poco incómodo. Así que me he agenciado un pequeño y coqueto Panasonic G Vario 1:4-5,6/35-100 mm ASPH Mega OIS. Para que comparéis, os pongo una foto con una solución similar para Canon EOS de formato completo. Esta última, medio paso de diafragma de promedio más luminosa, pero sin estabilizador óptico.

Como veis, es mucho más ligerito. Y sinceramente, en un uso cotidiano durante un viaje, no creo que el talabarte de 21 megapíxeles, con un objetivo que en su momento se consideraba decente, pero que se diseñó para la película tradicional, de mejor calidad de imagen que el pequeño conjunto de 16 megapíxeles enormemente mas portable.

El objetivo me has costado muy poco. Un 60% de su precio habitual que ya es económico. Pero es que es... como decirlo... de "km 0". Es decir... usado en escaparates y demostraciones. Pero está en excelente estado. Que no quería gastar gran cosa en un chisme así.

Mis primeras fotografías con el recién llegado, al salir del cine... Este pasillo siempre me ha parecido muy fotogénico.

Pero vayamos a la fotografía... o no... pasemos primero por la escultura... o fotografías de esculturas. En Cross Connect Magazine, revista virtual dedicada al arte contemporáneo, dedicaron un artículo al escultor barcelonés Jaume Plensa. Este escultor ha llenado el mundo de grandes, o pequeñas, esculturas de señoras, parece ser que son de género femenino, formadas por letras, sentadas, con las piernas recogidas en posición fetal y abrazadas por las manos. En Zaragoza, nos colocaron una en el recinto de la Expo 2008 con el título "Alma del Ebro". Lo cierto es que no le encuentro diferencias sustanciales a otras similares, extremadamente similares, que están repartidas por el mundo. Sin embargo, tiene otras esculturas que incluso si comparten elementos con las anteriores, presentan variaciones que me parecen interesantes. Bueno. Me resultó curioso y os lo dejo.

Vista general del "Alma del Ebro" que tenemos instalada en el antiguo recinto de la Expo en Zaragoza.
Vista parcial de la misma.
Esta versión mucho más pequeñita y metalizada, estaba o está en el exterior del Museo de Bellas Artes de Montreal, en Canadá.

El clásico de hoy es un clásico muy contemporáneo. Se trata de la fotógrafa Donna Ferrato, probablemente de las primeras en conseguir meterse en el mundo de la violencia de género y conseguir documentarlo fotográficamente, en un momento en el que no se hablaba del tema en el mundo. Incluso se la cosa, como se explica en el artículo de American Photo, empezó de forma inesperada. Me parece notable la historia que nos cuentan, y me ha gustado mucho el pequeño documental que incorpora el artículo. Está en inglés... ayudan los subtítulo disponibles,... también en inglés. Bueno... la verdad es que a mí me impresionó la historia y la experiencia que nos cuenta Ferrato.

Aislar los detalles, explotar el grafismo, siempre me han parecido dos de los motivos más interesantes para usar un teleobjetivo.

En un tono totalmente distinto, en Women in Photography, donde nos muestran el trabajo de fotógrafas, profesionales o aficionadas, no muy conocidas pero con calidad, nos traen el trabajo de fotografía documental en la calle de Natalia Jaeger. Desde mi punto de vista se sale de los caminos trillados por diversos motivo. Por el uso del color, y de forma muy inteligente. Por el tremendo respeto que muestra hacia sus sujetos, incluso si los fotografía de forma inadvertida. Por el intimismo y humanización de las personas que aparecen retratadas en su trabajo. A mi me gusta bastante más que la mayor parte de los "street photographers" al uso...

Su focal más corta puede ser útil para seleccionar elementos del paisaje; pero incluso la más larga nos permite aislar más algunos de ellos.

En Lenscratch nos han mostrado el trabajo de otra fotógrafa, me está saliendo muy femenina la entrada de esta semana, que ha sido premiada en algún sitio por el trabajo que nos presentan. Se trata de Judy Gelles, una fotógrafa que se ha acercado al mundo de la infancia. En concreto a los "fourth grades". Si no me equivoco, niños de 9 o 10 años que cursan el equivalente a nuestro cuarto curso de educación primaria. Proceden de diversos lugares del mundo y son mostrados de dos formas. En un retrato frontal, sin palabras, y en un retrato de espaldas, que se complementa con un texto en el que los niños hablan un poquito de quién son y cuáles son sus preocupaciones... y aquí hay de todo un poco también. A mi tocado la fibra sensible... aunque sea un proyecto aparentemente sencillo. Aparentemente es la palabra clave.

Sin ayudas extras, quizá no destaque en la fotografía de aproximación, por una distancia de enfoque mínimo discreta; pero quizá con alguna ayuda,... una lente de aproximación que ya tengo con un adaptador a la rosca del objetivo.

Flore es una fotógrafa de origen franco-español. Madre española y pintora. Pero desarrolla su trabajo en el país vecino. Usando proceso tradicionales argénticos. En L'Oeil de la Photographie nos muestran una serie que no aparece todavía en su página web, y que quiere ser un homenaje a la juventud en Indochina de la escritora Marguerite Duras, cuyo 20º aniversario de su muerte se celebra este año. A mí, el tono onírico y atemporal del conjunto de su obra me ha parecido interesante... No sé a vosotros.

Al caer la tarde y con un cielo nublado, interesa recortar el encuadre en el paisaje,... y viene bien el estabilizador cuando la luz escasea.

En general, el mundo del "cosplay", es decir, de los aficionados a disfrazarse de sus personajes favoritos de ficción, especialmente del mundo de las historietas, se suele asociar con un tono de alegría y desenfado. Sin embargo, como nos cuentan en L'Oeil de la Photographie, la fotógrafa rusa Mariya Kozhanova nos muestra una serie de retratos de "cosplayers" de su país cargados de melancolía y con mucha soledad. Un desprendimiento del entorno que se atribuyen a que son jóvenes que nacieron tras la caída de la Unión Soviética, en un país en el que los elementos de cohesión e identidad estaban desorganizados y difuminados, y que han ido tomando elementos foráneos, de diferentes culturas, tal vez sin haber llegado a integrarlos plenamente. No sé. Puede que sí, puede que no. Pero son de los pocos retratos de "cosplayers" que me han llamado la atención. Formato cuadrado, colores muy matizados y muy bien controlados, parece formato medio sobre película tradicional, pero no estoy seguro, miradas que transmiten distintas personalidades y, tal vez, motivaciones.

Aunque no sea especialmente aficionado a la actitud de "paparazzo" con el teleobjetivo,... a veces puede dar lugar a escenas con cierto interés.

Y terminaré contándoos que siendo principio de mes, ha salido el número 87 de Fractión Magazine. Viene muy interesante, con tres porfolios que me han llamado la atención.

El de Elli Chung, en el que relaciona su mundo cotidiano con los seres mitológicos del Asia Oriental.

El de Ashley Comer, sobre el reencuentro con la mujer que fue su madre biológica pero que la entregó en adopción al nacer para procurarle un mejor futuro.

las visiones parciales de lo cotidiano, que nos muestra el alemán Max Slobodda.

Espero que os gusten, como a mí.

Con una cámara tan pequeñita como la Panasonic Lumix GM5, parece que dos pasos es la máxima ganancia que obtenemos con el estabilizador. A 100 mm (200 mm equivalentes), una velocidad de obturación de 1/50 s parece lo máximo que puedo bajar. Con otra cámara con mejor agarre, a lo mejor se puede bajar algún paso más.