La fotografía como afición y otras artes visuales

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Retorno al pasado - aprender fotografía en 1948...

Esta semana he estado con una actividad doméstica frenética. Con el caos acumulado que tenía en casa por falta de espacio para guardar libros, finalmente me decidí a encargar un nuevo mueble librería, y llevo varios días ordenando y reordenando libros. Aun me llevará tiempo hasta que quede todo totalmente a gusto.

Pero lo mejor del caso es que al poner un poco de orden entre los volúmenes han ido apareciendo sumergidos entre otros algunos ejemplares que ya no recordaba. Así que el rato que no me lo paso acarreando libros y trastos de un lado a otro del piso, me siento a hojear nuevamente aquellos libros que si los compré sería por algo... digo yo.

Y entre los libros de fotografía han aparecido estos...

Se trata de siete libritos, pequeños, de aproximadamente 12 x 16 cms en su portada, y entre 50 y 70 páginas cada uno que formaban parte de una colección llamada FOTO BIBLIOTECA, publicados por EDICIONES OMEGA S. A. en BARCELONA. Los más antiguos, varios de los que tengo, lo fueron en 1948. Hace más de 65 años... Pero hay otros de los años cincuenta, y el más moderno es de 1965. En los de 1948, la FOTO BIBLIOTECA constaba de 15 volúmenes. En los de los años 50, llegan a mencionar 43 títulos distintos en la guarda anterior del libro, aparte de colecciones específicas dedicadas a la fotografía en color.

Los hay dedicados a aspectos más técnicos de la fotografía como la medición de la exposición, la utilización del exposímetro, la utilización de filtros, o el enfoque... y otros de carácter más artístico, como los dedicados al retrato, al paisaje o a los interiores con luz natural. Por hablar de los temas que tratan los siete ejemplares que compré en el año 2003 en la librería de los HERMANOS VIDAL, librería de viejo y de ocasión en la calle BALTASAR GRACIÁN de ZARAGOZA, junto a la PLAZA DE SAN FRANCISCO. Alguno de los libros llevan incluido un sello de la difunta LIBRERÍA LEPANTO, que se encontraba en la avenidad de la INDEPENDENCIA, también de ZARAGOZA.

Todos los libros vienen con mayor o menor número de fotografías ilustrativas de las técnicas propuestas. Dada la antigüedad de alguno de los libros, la calidad de las fotografías no me parece mala. Y en el caso del más moderno, he visto libros y revistas de esa época realizados en ESPAÑA con bastante peor calidad. Con frecuencia en aquellas décadas, las fotografías en blanco y negro aparecían excesivamente contrastadas en los libros, perdiendo los matices y la gama de grises intermedios con facilidad.

También aparecen algunos esquemas y gráficos que ilustran la aplicación de las técnicas propuestas. Los libros son traducciones de autores extranjeros, probablemente británicos, con algún alemán también. En lo que he ido revisando, las traducciones son correctas y usan los términos técnicos con propiedad, cosa que no sucede hoy en día, especialmente desde el advenimiento de la fotografía digital y la generalización del uso de internet, en el que las palabras técnicas inglesas reciben traducciones inapropiadas a sus equivalentes en castellano que han existido toda la vida. En castellano, el dispositivo óptico que se pone delante del material sensible para conducir la luz hasta él, garantizando la nitidez y la fidelidad de la escena, se ha llamado de siempre "objetivo". Y está formada por un número variable de lentes, dependiendo de la complejidad del diseño. Pero como en inglés, utilizan la palabra "lens" para referirse al objetivo, no es infrecuente encontrar traducciones en documentos actuales que llaman "lentes" a los "objetivos". No hay errores de este tipo en estos venerables libritos.

En líneas generales, en lo que he leído y revisado me pregunto si alguien que dispusiera de una cámara moderna podría aprender fotografía con unos libros de aquel tipo. Desde luego no a manejar archivos digitales. O hay conceptos como el de temperatura de color que no es que no se manejaran, sino que se hacía de otra forma. Yo creo que muchos de los conceptos vertidos en estos libros siguen siendo perfectamente válidos.

Como ya he dicho, fueron publicados por EDICIONES OMEGA S. A., editorial que todavía existe y que tiene una larga tradición de publicación de libros técnicos sobre fotografía. De hecho, cuando empecé a tomarme en serio la cosa de la fotografía, el mejor libro que tuve y tengo, bien conservado lo publicó dicha editorial. Se trataba de FOTOGRAFÍA BÁSICA de MICHAEL LANGFORD, y era un libro que planteaba los conceptos de forma rigurosa y muy clara. Y a pesar de ese adjetivo "básica", era más completo que otros que te prometía descubrirte todos los secretos de la fotografía. Como nos informan en este artículo, LANGFORD falleció en el año 2000, pero aun hoy en día se siguen publicando los libros bajo su nombre, aunque obviamente los escriben otros autores. Siempre se respeta la coautoría del fallecido, indicando que el cuerpo de conocimiento que aportó sigue en el libro, que se considera actualizaciones de los que él escribió. Y luego está la cosa del prestigio que aporta el nombre claro, que mejora las ventas.

Para finalizar, una anécdota. Algunos de los libritos, en su contraportada llevan escrito en caracteres ideográficos una conocida frase, que según nos dicen se trata de un proverbio chino: "Una imagen vale más que mil palabras".

Me ha hecho mucha gracia. Todavía no sé si se estaban quedando con el personal, o realmente se trata de un proverbio chino...