Experimento fallido - NocolorStudio nº 5 High Contrast con Pentax MX y SMC-M 40 mm
A finales de diciembre del año pasado llegaron a mi poder unos rollos de película envasada por alguien en Lituania bajo la marca NocolorStudio. Son películas, o papel en rollo, de muy distinto origen y características, que iré contando conforme los vaya utilizando. Hoy os presento los (malos) resultados que he obtenido del primero de los rollos que he utilizado, el NocolorStudio nº 5 High Contrast Orthocromatic.
Como su nombre indica, más o menos, es una película de muy baja sensibilidad, ISO 5, ortocromática, en principio nula sensibilidad espectral al rojo, y de alto contraste. Parece que es una película de uso técnico, utilizada para el copiado, el archivo y la reproducción de documentos mediante técnicas de microfilmado, asegurando gran nitidez, ausencia de grano, y el alto contraste necesario para que los textos se lean con precisión. Tiene una base de PET muy transparente y fina, lo que hace que la densidad de la base+velo tras el revelado sea muy baja.
Como el envasado de la película en el carrete es casero, claramente, recomiendan usarlo en cámaras de avance mecánico, evitando las cámaras con motor eléctrico para el avance y el rebobinado. Por ello, la utilicé con la fiable Pentax MX. Y como no quería llevar mucho engorro, e incluso permitir introducir la cámara con su objetivo en un bolsillo del chaquetón en un momento dado, le puse el objetivo pancake de la marca, el SMC-M 40 mm f2,8. No es el objetivo más nítido de la marca, pero es decente. Quizá, por un poquito más de grosor, le tenía que haber puesto el SMC-A 50 mm f2... pero ya digo que me interesaba poder introducirlo en el bolsillo del chaquetón en un momento dado. Siempre he considerado el fotómetro de la Pentax MX como muy fiable a la hora de ayudarme a determinar la medición adecuada.
Dicho fotómetro sólo llega en sus posibles ajustes de sensibilidad de la película hasta ISO 25 por el límite inferior. Lo que es dos pasos y un tercio más que la sensibilidad ISO 5 de la película. En general, en condiciones de día soleado, las mediciones que me ofrecía estaban en las situaciones más luminosas con sol radiante en torno a f4,5 con 1/60 segundo de velocidad de obturación. Lo cual es coherente con la regla del "soleado f16". En la práctica, fotografiando al aire libre, usé una velocidad fija de 1/60 segundo para evitar trepidación por la cámara y el golpe del espejo, y aperturas de f4 o f2,8. Me parece que, dadas las condiciones de la toma, eran parámetros adecuados para la sensibilidad declarada de la película.
No tengo tiempos de revelado "oficiales" para Kodak HC-110, y menos aún para el SPUR Acurol-N que es el otro revelador del que dispongo. Me puse en contacto con el lituano que lleva este cotarro a través de su cuenta en Instagram, mediante un comentario en una de sus fotos, para saber si tenía experiencia con el HC-110. Me dijo que no, pero en el intercambio de comentarios, anuncié mi idea de hacer un revelado desatendido, y le pareció bien. Así que HC-110, dilución 1:160 y 50 minutos de revelado desatendido con 20 inversiones del tambor al principio y cuatro a la mitad del tiempo de revelado. En el mismo tambor iba otra película del mismo origen pero diferentes características, con 640 ml de preparado, lo que garantizaba un mínimo de 5 ml de revelador en la dilución. Fue digitalizado con la Panasonic Lumix G9 (ya veremos si sigue funcionando después de su paso por taller) y el Leica DG Macro-Elmarit 45 mm f2,8 ASPH OIS. El resultado... una enooooorme subexposición. Sorprendentemente, sobre los negativos digitalizados he encontrado materia, en luces y en sombras. Pero al ajustar el contraste, han salido deficiencias tanto en la película como en el sensor de la Lumix G9 (manchitas), que normalmente pasan absolutamente desapercibidas. Una estética sólo aceptable para los "lomógrafos" y otros fotógrafos similares, que asocian fotografía con película tradicional a chapuzas aleatorias. El aspecto de las fotos es de un momento del día crepuscular, cuando están tomadas entre las 15:30 y las 17:00, ya en la última semana de enero, en la que el sol se esconde a las 18:00 horas de la tarde. Es decir, bastante antes de la hora dorada, en la que hay que empezar a flojear la intensidad general de la luz del sol.
La película no es muy cara. Son 5,10 euros por rollo de 29 fotogramas. Más los gastos de envío desde Lituania. No hay aduanas; son Unión Europea. Pero no me veo yo utilizando esta película de nuevo. Aunque creo que visto lo visto en este rollo fallido, puede tener posibilidades. En cualquier caso, si quiero tener películas de baja sensibilidad y grano fino, prácticamente invisible, hay películas entre ISO 25 e ISO 80 perfectamente utilizables. Ortocromáticas o no. Incluso los inventos de Lomography, en realidad Orwo, de ISO 8 e ISO 13, son más utilizables y fiables. Aunque sean más caros. Pero bueno, esto es lo que os puedo contar.