Estamos a mitad de noviembre, y todavía estoy comentando experiencias con rollos de película que hice a principios de septiembre, cuando todavía era verano, y el sol de justicia y los cielos despejados reinaban sobre las calles de Zaragoza. A pesar de que hoy me he cogido un día de fiesta, no ando sobrado de tiempo, así que lo haré breve.
A lo largo de este año he usado mucho el revelador SPUR Acurol-N, un frasco sin estrenar que me regalaron por estas fechas hace un año. Es un revelador que me ha gustado. Es fácil de usar, de forma parecida al Rodinal o al Kodak HC-110. No se estropea con facilidad y aguanta una vez abierto, se puede usar a distintas diluciones, y como estas son elevadas, un frasco dura bastante, por lo que a la larga puede resultar económico. Entre los inconvenientes están que no siempre encuentras una fórmula de revelado para una determinada emulsión, cosa que no sucede con los mencionados, y que con muchas emulsiones, el índice de exposición recomendado esta uno o dos pasos por debajo de la sensibilidad nominal de la película.
En la hoja de especificaciones de la película, además de indicar la concentración, la temperatura y el tiempo de revelado recomendados para una determinada emulsión, te suelen indicar cual es el contraste esperado. Por supuesto, muchas de las fórmulas recomendadas son para un contraste normal. Pero he observado que cuando el índice de exposición está por debajo de la sensibilidad nominal de la película, esas fórmulas de revelado proporcionan unos contrastes adecuados pero contenidos. Es decir, al igual que sucede con otros reveladores cuando se baja el índice de exposición de la película y se limitan los tiempos de revelado para un tipo de película con el fin de bajar el contraste. Hay que decir que el Acurol-N tiene un cierto carácter compensador a diluciones altas, marcando distintas velocidades de revelado para las luces y las sombras, especialmente con agitaciones poco enérgicas. Y son frecuentes las diluciones 1+70, e incluso superiores.
A principios de septiembre no había probado todavía la Ilford HP5 Plus con este revelador. Y francamente, usar esta película ISO 400 en días de verano con sol radiante,… no me apetecía mucho. Pero consulté la hoja del Acurol-N y vi que recomendaba un índice de exposición para esta película. Cargué un rollo de formato 120 en la Fujifilm GS645S Wide 60 y añadí un filtro naranja al objetivo. Por lo tanto, tuve que ajustar el fotómetro de la cámara, que no lee a través del objetivo, a IE 50 para obtener la exposición correcta. Lo que esperaba es que el revelado con Acurol-N controlara el contraste final del negativo, al mismo tiempo que el filtro naranja mejorase el contraste de los detalles; especialmente que evitase unos cielos excesivamente aburridos. Aunque al final no hubo ni una nube que destacar.
Revele en Acurol-N 1+50 durante 12 minutos a 20 ºC, con una agitación moderada. Unas cuantas inversiones tranquilas del tambor de revelado al principio del primer minuto de revelado, y un par de inversiones tranquilas al principio de cada minuto hasta el final. Como de costumbre, digitalicé con la Olympus OM-D E-M5 Mark III y el Panasonic Leica DG Macro-Elmarit 45 mm f2,8 OIS ASPH, a alta resolución, obteniendo ficheros de prácticamente 70 megapíxeles. El resultado es muy bueno. El grano es apreciablemente más fino que en otros revelados que he hecho para la HP5 Plus. Si a ello añades el tamaño del negativo de medio formato, el grano apenas cuenta en la ecuación. Y a pesar del fuerte contraste de la luz veraniega, luces y sombras se conservaron sin problemas, con una excelente gama de grises. Sin duda, una fórmula a considerar para el futuro.
