La película instantánea Instax de Fujifilm tiene casi todo para ser una forma muy divertida para expresarse fotográficamente, de un modo más informal y despreocupado. Lo cual no quiere decir que no hay que tener un cierto cuidado con la calidad de la imagen fotográfica, especialmente si eres un aficionado a la fotografía y no un mero, y muy respetable, generador de recuerdos personales. Pero ya he comentado en repetidas ocasiones que las “soluciones” de Fujifilm ocasionan en determinadas situaciones más problemas que auténticas soluciones. Por el lado de la película, recordemos que tiene sus limitaciones. Hay quien se queja de su falta de nitidez. Y ciertamente ahí hay una limitación. Fujifilm nos informa que la película Instax está pensada para resolver 12 pares del líneas por mm. A algunos les parece poco, pero teniendo en cuenta el tamaño de las fotografías… no está mal. No está pensada para ser ampliada. Por cierto, cuando se digitaliza, no merece la pena escanearlas a una resolución de más de 600 píxeles por pulgada o 240 píxeles por centímetro. No hay ninguna ventaja. Con esa resolución, las copias directas que ofrecen las cámaras Instax tendrían que poder verse bastante nítidas. En mi opinión, si no siempre sucede así se debe más a las limitaciones de la cámara, especialmente en lo que se refiere a su apertura mínima, que no garantiza un enfoque por zonas adecuado, a la falta de un sistema de enfoque razonable y, en menor medida pero también, a la limitada calidad óptica de sus lentes.
También está el problema de la falta de latitud de exposición de la película, que nos lleva a que errores en la exposición, que es automática siempre y por lo tanto los habrá, traen malas fotos. Y también a que las escenas más contrastadas lleven consigo luces quemadas que quedan mal. Pero es que además hay otro problema. Con una sensibilidad nominal ISO 800, para exponer correctamente a plena luz de día en un día soleado, con una velocidad máxima de obturación de 1/400 segundo que tienen, necesitas una apertura f22. Y la apertura mínima de estas cámaras es de f12,6. Es imposible exponer correctamente con esa condición de luz. Sobreexpondrá siempre. Por más de un paso. No hay otra.
Por este motivo, en el último cartucho de película que utilicé con mi Fujifilm Instax SQ6, decidí usar un filtro que le robase al menos un par de pasos a la exposición de la película. La película fue un cartucho comparado de ocasión, más barato, pero en buenas condiciones, de película Instax Square Color Black Frame. Es decir, en color con el marco en negro. Que me parece muy elegante. Y el filtro… La cámara no tiene ninguna rosca ni ningún método para ponerle un filtro al objetivo. Al flash, sí; viene con un juego de filtros de color. Así que hay que sujetarlo con dos dedos de la mano izquierda mientras sujetas la cámara con el resto de la mano, y accionas el disparador con la mano derecha. Un zurdo probablemente lo haga al revés. Para cubrir tanto la lente frontal como la célula del fotómetro, con el fin de que la cámara mida adecuadamente la exposición, estimé que hacía falta por lo menos un filtro de 52 mm de diámetro. Y en principio lo normal sería usar un filtro de densidad neutra de al menos dos pasos de pérdida de luz. Un x4. Lo cual podría haber hecho con filtros de mayores dimensiones. Con un filtro de 55 mm que tiene muchos años y no usó, que acabé usando, opté por un polarizador. Que también me quita esos dos pasos de luz.
Salvo para el autorretrato, en el que tuve que hacer virguerías para sujetar el filtro mientras hacía la foto usando el temporizador y apuntaba hacia mi rostro, no fue incómodo usarlo. De las fotos del cartucho, sólo la primera, la de los hibiscos a la sombra, no necesitó el filtro. Y lo que sucedió es que en muchas ocasiones el filtro polarizador oscureció el cielo azul bastante profundamente. El filtro es muy antiguo. Igual tiene 30 años. O más. Y es un polarizador lineal, de cuando usaba la Pentax P30N que no tiene enfoque automático. Y los polarizadores lineales tiene un efecto más potente que los polarizadores circulares que se generalizaron con las cámaras de enfoque automático. Lo de circular hace referencia al método de polarización de la luz y no a la forma redonda del filtro. En general, conseguí exposiciones adecuadas para el conjunto de las 10 fotos, por lo que sólo se quemó alguna luz en situaciones muy contrastadas. A partir de ahora llevaré algún filtro acompañando a la Instax SQ6 para cuando las condiciones lo indiquen. Es una recomendación para todos los aficionados a las películas Instax. Y un ruego a Fujifilm de que por favor ofrezcan una cámara adecuada a las posibilidades de la película.