Paisaje periurbano al atardecer – Hasselblad 500CM con Planar 80 mm y Kodak Ektar 100

Ya adelanto que la experiencia con este rollo de Kodak Ektar 100 en formato medio fue hasta cierto punto una experiencia fallida. Mis previsiones sobre la luz que iba a reinar en una tarde de sábado de finales de junio fueron demasiado optimistas sobre lo que fue la realidad posterior y la sensibilidad de la película se me quedó corta para lo que me planteé. Especialmente porque como no pensé en necesitar trípode… no lo cogí. Y realmente me hubiera venido muy bien. Os lo cuento.

Llevaba esperando un tiempo las condiciones que yo consideraba ideales para realizar algunos paisajes en los suburbios de Zaragoza, en la zona entre el Canal Imperial de Aragón y el Tercer y Cuarto Cinturón. Los alrededores del camino de Miraflores. Por una cuestión que me llegó hace unos días a través de un mensaje directo privado en red social, quiero aclarar el concepto de “suburbio” o zona suburbial para mí. El mensaje procedía de un hispanohablante residente en Estados Unidos. Y lo haré tirando de diccionario.

En el diccionario de la Real Academia Española, suburbio viene definido como “barrio o núcleo de población situado en las afueras de una ciudad y que, generalmente, constituye una zona deprimida”. Sin embargo, en el idioma inglés, y tiro del diccionario Oxford, suburb es “an outlying district of a city, especially a residential one“. Es decir, una zona residencial en la periferia de la ciudad. Y si el DRAE nos advierte que generalmente los suburbios son zonas deprimidas, el ejemplo de uso de la palabra suburb del Oxford es de una zona residencial respetable. Es decir, más allá del hecho de que se encuentran en la periferia de las ciudades, el suburbio en castellano suele ser cutre, mientras que el suburb en inglés suele ser respetable, incluso de cierto nivel socioeconómico. Y de ahí venía la confusión de esta persona que he mencionado. Para mi el suburbio es esa zona donde la ciudad termina y empieza el campo, generalmente destartalada, en constante cambio, asociada a viviendas para rentas bajas, en algunas ocasiones a la exclusión social, y que fotográficamente presenta muchas oportunidades para quien está interesado en el paisaje alterado (profundamente) por el ser humano.

Contaba ese sábado con cielos con nubes, que aliviaran la dura luz del sol propia de la época en torno al solsticio de verano. No quería la luz crepuscular. Pero tampoco una luz intensa y dura, persistente en esa época del año hasta pocos minutos antes de la puesta del sol, que desciende muy vertical sobre el horizonte, por lo que la llamada hora dorada por los cursis de la fotografía, el tiempo en que predomina una luz más cálida que la de las horas centrales del día, es muy corta. Pero quería cierta direccionalidad en la luz, que diese viveza a los colores y volumen a las texturas. Además, mi película de elección para mantener esa viveza de los colores era la Kodak Ektar 100 sobre la Hasselblad 500CM y un objetivo estándar, para perspectivas naturales, el Planar 80 mm f2,8 CF T*.

Pero las nubes se acumularon mucho más de los previsto, quedando la última hora de la tarde prácticamente con un nublado completo. Y con una luz mucho más reducida de lo esperado. Con la escasa profundidad de campo del formato medio, esto comprometía la nitidez de la imagen. O bien apuraba la velocidad de obturación, dejándola en un mínimo de 1/60 segundo a mano alzada, lo cual siempre es un riesgo con el contundente retorno de un espejo como el de la 500CM, por amortiguado que esté… o habría el diafragma, obligándome a seleccionar con mucho cuidado donde enfocar. Decididamente, tendría que haber cogido un trípode. El resultado es fotografías más planas de lo previsto, que no me disgustan del todo, pero que no siempre alcanzan la nitidez buscada en todo el campo de la imagen. Y eso que la Ektar 100 colabora muy bien a la hora de mantener la vivacidad de los tonos en la imagen. Querría haber vuelto a una nueva ronda… pero está siendo un verano de sol inclemente y luz muy dura. Con temperaturas además muy elevadas. Ya veremos cuando puedo volver a lo mismo.