Quien haya leído previamente las entradas de este blog, o en sus entradas anteriores al 1 de abril de 2022, dedicadas a la fotografía con película fotoquímica tradicional en los viajes sabrá que mi combinación de cámara y material sensible más habitual es la Minox 35 GT-E con Ilford XP2 Super 400. La cámara tiene flexibilidad suficiente para controlar la estética y la exposición de la toma dentro de unos límites razonables, buena calidad óptica y ángulo de visión, el de su focal de 35 mm, adecuado para el reportaje. Por otro lado, la Ilford XP2 Super 400 es una película con una amplia latitud de exposición. Con una sensibilidad nominal ISO 400, con un revelado C-41, igual al de las películas negativas en color, permite ser expuesta a índices de exposición entre 50 y 800 sin modificar los tiempos de revelado y con buenos resultados. Mostrando un grano más fino cuando menor sea el índice de exposición. Es decir, cuanta más luz le hagamos llegar. Yo suelo ajustar la cámara a un índice de exposición 200.
Como en los últimos tiempos, desde los meses de confinamiento por la pandemia, no la había usado con película negativa en blanco y negro para revelado convencional, hay algo que se me había borrado de la memoria. La medición con el fotómetro de la cámara es consistente pero con un marcado sesgo a la sobreexposición de al menos un paso. Es decir, por hablar de alguno de los rollos que tiré en aquellos revueltos momentos, para conseguir la mejor exposición en un rollo de Ilford FP4 Plus con sensibilidad nominal ISO 125, conviene ajustar en la cámara un índice de exposición 200 o 250. Pero revelar con las concentraciones y tiempos recomendados para su sensibilidad nominal.
El día uno de mayo pasé el día en Logroño. Lo conté en el Cuaderno de ruta. Y recientemente, el sábado 4 de junio fui a Monzón, con ocasión de ARTEria, su feria de arte contemporáneo. También lo conté en el Cuaderno de ruta. En las dos ocasiones, además de cámara digital, me llevé la Minox 35 GT-E, como es habitual en mis viajes. Pero no usé la XP2 Super, sino que me llevé unos rollos de Ilford Delta 400, que revelé en SPUR Acurol-N 1+50 durante 10 minutos y 30 segundos, de acuerdo a las recomendaciones del fabricante del revelador. Y de acuerdo a estas recomendaciones, ajuste en la cámara un índice de exposición 200. Recientemente hablé de esta combinación de película y revelador, pero usando la Leica CL y exponiendo por estimación con la regla del “soleado f16”. El caso es que ambos rollos me quedaron tremendamente densos. En parte porque tendría que haber recordado que para un índice de exposición efectivo 200, por el sesgo del fotómetro de la cámara tendría que haberlo ajustado a la sensibilidad nominal de la película, ISO 400. Pero también por otro motivo.
Las cámaras tienen lo que se llama un punto de corte. Aunque hace mucho que no oigo hablar de este concepto. Si a pleno sol, cuando más luz hay, la exposición correcta es f16 con la velocidad de obturación igual al inverso de la sensibilidad de la película, para ISO 400, la exposición correcta será f16 y 1/400 segundo. Si el diafragma se puede ajustar a f16 en su posición más cerrada, como sucede con la Minox 35 GT-E, la sensibilidad máxima de la película que podremos usar a pleno sol será la inversa de la velocidad máxima de obturación. Y con esta cámara es 1/500 segundo. O sea una película, en la práctica, ISO 400 (porque no hay películas ISO 500). Películas más sensibles quedarán sobreexpuestas. Ahora bien… yo tiendo a evitar el f16, porque la imagen se degrada por la difracción y, con una focal de 35 mm, a f11 tengo profundidad de campo suficiente para casi cualquier escena. Si el índice de exposición correcto es 200, la exposición a f11 sera 1/400-1/500 a pleno sol. Pero si me estoy equivocando y no estoy ajustando correctamente el fotómetro… se estará socarrando más todavía la película. Es decir… que en escenas a pleno sol, y tanto en Logroño como en Monzón tuve sol a raudales, la sobreexposición fue de hasta dos pasos. Y eso no conviene. La imagen se puede salvar… pero obliga a compromisos, es más difícil de positiva tanto en un laboratorio como en un procesado digital, en este último, por los ajustes de la luminosidad y el contraste aparece más grano… En fin, que no estoy especialmente satisfecho. Lo cual, no me pasa con la XP2 Super, que aguanta sin problemas esa sobreexposición, e incluso permite tener una imagen más limpia de grano. Avisados quedáis.