Vamos a seguir avanzando en mis experiencias fotográficas de los últimos meses, con especial atención a la fotografía con película fotográfica tradicional. Seguimos en el mes de abril, tras regresar de mis vacaciones de Pascua en Italia. Y con una novedad. Relativa. Pero bienvenida. En marzo de este 2022, Kodak anunció la comercialización de una nueva denominación en su catálogo de películas fotográficas.
Encuadrada en la página web de Kodak Alaris dentro de las películas profesionales para negativos en color, se presentaba la Kodak Professional Gold 200 en formato 120. ¿En qué medida es esta una nueva película? ¿O más bien una variante de fórmulas ya existentes sobre un nuevo formato? Hemos de decir que la denominación Gold 200 tiene ya un tiempo. 35 años. En 1987 se presentó la marca Kodacolor Gold, en sensibilidades ISO 100, 200 y 400, sustituyendo a denominaciones anteriores para las películas destinadas al aficionado o fotógrafo ocasional, en una diversidad de formatos. Por ejemplo, la Kodakcolor Gold 200 se presentó entre ese año y 1997 en los formatos 110, 135, 120, 126, 127 y 620.
En 1997 cambió su denominación a Kodak Gold 200. Y yo creo que con esa denominación ha perdurado hasta nuestros días en formato 135, o película biperforada de 35 mm de ancho. Previamente, Kodakcolor era la denominación para películas negativas en color, mientras que Kodachrome y Ektachrome eran denominaciones para películas diapositivas en color. Durante un tiempo, las denominaciones Kodak Ektar, película negativa en color para profesionales de colores saturados, se denominaron Royal Gold. Los fabricantes, con el tiempo, van introduciendo cambios o mejoras en las emulsiones, a veces de forma pública y anunciada… y otras de forma más inadvertida. Pero si miramos las características técnicas de la “nueva” Kodak Gold en formato 120, y las comparamos con la Kodak Gold 200 en formato 135,… el documento PDF es el mismo. Incluso en la hoja técnica no aparece por ningún lado que exista el formato 120, sólo el 135 (de una forma reduccionista, habla de un tamaño de negativo de 24 x 36 mm), a pesar de que la hoja esté fechada en marzo de 2022. La única novedad, por lo tanto, es el formato. Que no es poco.
He usado con antelación la Kodak Gold 200 en formato 135. Y ya he comentado en ocasiones que es una sensibilidad en la que no me siento cómodo. Ni es tan luminosa para ser una auténtica todoterreno como las películas ISO 400, antaño Gold 400, hoy en día Ultra MAX 400, ni es una película de grano muy fino como podrían ser las películas ISO 100. El caso es que decidí que, dados los precios de las películas negativas en color para cámara de formato medio, a pesar de todo me podía interesar, y pedí un par de envases con cinco rollos cada uno. Y aquí comento mis impresiones sobre los dos primeros.
Utilicé dos cámara para estos dos primeros rollos. El primero lo expuse con la Hasselblad 500 CM, con el visor de capuchón, sin fotómetro incorporado, usando el Sekonic Multimaster L-408 para evaluar la exposición. Las fotos de ejemplo son cuadradas, de igual alto que ancho, procedentes de los negativos de 56 x 56 mm. El segundo lo expuse con la Fujifilm GS645S Wide 60, con fotómetro incorporado. Las fotos de ejemplo son rectangulares, procedentes de los negativos de 42 x 56 mm. Todos ellos resultaron en exposiciones correctas para su sensibilidad nominal ISO 200. Ninguna sorpresa aquí, teniendo en cuenta que proceden de la misma emulsión que la Gold 200 en formato 135.
No vamos a hablar mucho de las cualidades de los colores de la película… porque depende mucho del laborante que escanea la película. En qué medida ha ajustado el contraste de la imagen o ha dejado alguna dominante residual en el archivo de imagen. Lo que sí me atrevo a decir es que la saturación de la película está en algún punto medio entre la Kodak Ektar 100, más saturada, y los colores más suaves de la Kodak Portra 160. Quizá más cerca a esta última que otra cosa. En general, un punto medio bastante adecuado para usos múltiples. Donde sí que cambia mi apreciación, pero no debido a las virtudes de la emulsión si no del formato, es en la nitidez y el grano fino de las imágenes. Con una superficie de negativo 3,6 veces o 2,7 veces mayor que con el negativo de 24 x 36 mm, todo es más nítido y con menos grano aparente. Los resultados son muy buenos.
Aunque no se pueda considerar una película barata, es bastante menos cara que las Kodak Portra. Las más adecuadas hasta el momento para exponer a índices de exposición de 160-200. Por lo tanto, me atrevería a decir que se ha convertido desde ya en una película de elección para el formato medio. Aunque algunos nos gustaría que en ocasiones llegase a una sensibilidad ISO 400. Pero claro… ahora, lo que toca, es hacer una prueba de exposición a un índice de exposición 400 y solicitar un revelado forzado. Y ver qué pasa. Si se convierte en la película de elección para todo tipo de situaciones. Aunque no soy yo alguien muy aficionado a salirme de las sensibilidades nominales (o más adecuadas para cada película) y a los forzados.