Me tomo un descanso de mi recorrido por el PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD en JAPÓN, para trasladarme aunque sea durante un día al sur de ESPAÑA, a la antigua ciudad romana y posterior capital del califato omeya, CÓRDOBA, cuya antigua mezquita (actualmente catedral católica) y cuyo casco histórico reciben también la calificación de PATRIMONIO CULTURAL DE LA HUMANIDAD. Y no sólo es eso. Aunque mi visita no coincida con el evento, que es en mayo, un particular elemento de la ciudad bética, los patios, son la clave fundamental para LA FIESTA DE LOS PATIOS, también declarada PATRIMONIO CULTURAL INMATERIAL DE LA HUMANIDAD.
Como podemos ver, si alguien todavía no se había enterado, estamos ante una de las ciudades más potentes histórica y culturalmente de ESPAÑA y probablemente del mundo. Así que ahora que el AVE sólo tarda en llegar tres horas y media desde ZARAGOZA, y todavía podría durar menos el viaje si no fuera por las "peculiares" formas de Renfe de gestionar sus trenes, decido pasar un día con una amiga paseando por la capital del antiguo califato.
Un comentario sobre el viaje. Formalmente, el viajero encontrará en la página de la compañía ferroviaria española la existencia de un tren que sale a las 7:05 de ZARAGOZA-DELICIAS en dirección a SEVILLA. Pues es una cosa muy rara. Sólo venden un coche con plazas para este recorrido completo, el número 8, categoría turista. El resto de los siete coches, entre ZARAGOZA y MADRID sólo admiten viajeros entre estas dos ciudades, y entre MADRID y SEVILLA, pues lo mismo. Y se pega casi media hora en MADRID hasta que sale el tren de nuevo. En ocasiones, obligan a los viajeros de ese coche número 8, como me pasó a mí, a cambiar de tren, a otro coche número 8, en MADRID. Como ya digo, la gestión de los trenes en Renfe se podría calificar de "peculiar". Porque puede suceder que ese coche vaya lleno y el resto del tren medio vacío, y los coches de categoría preferente o turista-plus están vedados a los viajeros del trayecto global. Salvo que saques dos billetes. Uno hasta MADRID y otro hasta el siguiente destino. A mí me parece, en su conjunto, algo demencial. La típica gestión orientada hacia la propia organización y no hacia el usuario, el perjudicado de este follón.
Pero en un momento dado, con sólo un minuto de retraso, después de haber arrastrado hasta 25', llegamos a CÓRDOBA, donde me esperan en el vestíbulo de la estación. Tras tomar un café y un bollo para coger fuerzas, comenzamos a pasear la ciudad. Porque de eso se trata de pasear entre las maravillas que nos ofrece.
En un primer tramo pasamos por restos romanos, la sinagoga y antigua judería, algunos patios y, por supuesto, el dédalo de estrechas calles encaladas que constituyen el casco histórico de la ciudad. Esta nublado pero parece que con tendencia a abrirse. La temperatura es ideal para hacer turismo.
Inevitablemente nuestros pasos nos llevan hasta el principal centro de interés de la ciudad, la antigua MEZQUITA, travestida en la actualidad en catedral católica. Nos empapamos del ambiente que reina en el PATIO DE LOS NARANJOS, antes de entrar en el interior a perdernos en el bosque de columnas y arcos de herradura de la amplia mezquita.
Se nos hace la hora de comer, mientras el cielo vuelve a cerrarse. Amenaza claramente lluvia como nos anuncian los lugareños. Tras la agradable comida, bajamos las calorías con un nuevo paseo entre callejuelas y patios, antes de dirigirnos a la orilla del GUADALQUIVIR y a visitar los jardines del ALCÁZAR cristiano.
Ya con lluvia constante, no intensa pero un calabobos que nos obliga a abrir los paraguas si no queremos calarnos hasta los huesos, nos encaminamos al PALACIO DE VIANA, lugar que nunca había visitado en mis anteriores estancias en la ciudad. Aunque espectacular por la belleza de sus patios y por la riqueza de las colecciones artísticas acumuladas, la vida de los aristócratas que lo poseyeron no nos resulta especialmente simpática que digamos. En cualquier caso, será la última parada antes de volver a la estación, a coger otro AVE con un planteamiento idénticamente estúpido al del viaje de ida.
En estos días atrás, dos publicaciones periódicas, de las de toda la vida, de las de papel, han llegado hasta mis manos. Acompañando, algunas de las fotografías tomadas en las dos únicas horas que en estas pasadas fiestas del Pilar dediqué a pasear relajadamente por la ciudad. No hubo tiempo ni ocasión para más.
Por un lado, el número 46 de la serie 100 FOTOGRAFÍAS POR LA LIBERTAD DE PRENSA, que periódicamente REPORTEROS SIN FRONTERAS, en francés y en inglés. Pero las cien fotografías son un lenguaje universal. Con su contenido precio que no llega a 10 euros por volumen, hace tiempo que sostengo que es una buena forma de hacerse una pequeña biblioteca de fotografía, y además colaborando por una buena causa. Este número 46 contiene 100 fotografías de PETER LINDBERGH. LINDBERGH es un excelente retratista y fotógrafo de moda que ha trabajado con multitud de gente del mundo del famoseo. En este volumen encontramos fundamentalmente retratos femeninos, de caras bien conocidas del mundo de la moda y del cine sobretodo. Muchas caras guapas, de todos los colores siempre que pertenezcan a una amplia y delicada gama de grises entre el blanco y el negro. Altamente recomendable, claro.
La segunda recomendación viene de la mano del número 38 de la revista OJODEPEZ (FACEBOOK), revista española publicada por LA FÁBRICA, y dedicada a difundir la fotografía documental. En este número nos presenta los ganadores y finalistas del PREMIO PHE OJODEPEZ 2014. Mencionaré aquí que el lugar de honor, el ganador absoluto es AITOR LARA, con un potente reportaje sobre la pobreza infantil en nuestro país. Pero que hay varios reportajes que podrían haberse llevado con igual merecimiento el premio. Así que a por la revista, que está ahora en algunos quioscos.
Hace unos días comentaba que hasta cinco lugares cualificados por la UNESCO como PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD hemos visitado durante nuestro viaje de dos semanas a JAPÓN. Y os hablaba en ese momento de la bella isla de MIYAJIMA, que combinaba en el mismo lugar la riqueza cultural de los antiguos santurarios sintoístas diseminados por ella con la belleza natural de los bosques primordiales subtropicales que cubren las laderas del monte MISEN.
Hoy volvemos a un entorno que también recoge en un mismo entorno la significación cultural con la majestuosidad de la naturaleza. Un lugar que además es en muchas ocasiones un auténtico símbolo de todo JAPÓN. Se trata del MONTE FUJI.
Para empezar, una observación. Según la propaganda y las imágenes vistas durante toda nuestra vida, el MONTE FUJI, FUJISAN (富士山) en japonés y no fujiyama como se dice a veces en Occidente, se ve desde todas las partes de forma impresionante. Bueno. Con sus casi cuatro mil metros de altura, su casi perfecta forma cónica, y sus amplias faldas, es impresionante. Pero es difícil de ver si no te acercas a los alrededores. Las nubes, la bruma, otros montes hace que sea más tímido de lo que parece. Lo vimos por primera vez casi por casualidad cuando nos dirigíamos montados en el Tohoku Shinkansen a ver otro lugar magnífico como son los templos y santuarios de NIKKO. De ellos, os hablaré otro día.
Con el fin de poder apreciar debidamente la magnificencia del lugar nos acercamos a una de sus áreas cercanas, la región de los cinco lagos de FUJIGOKO, en concreto a las riberas del lago KAWAGUCHI. Paramos previamente en la ciudad de FUJIYOSHIDA, desde donde salía una de las rutas de ascenso al MONTE FUJI, concretamente atravesando un monasterio sintoísta, el KITAGUCHI HONGU FUJI SENGEN JINJA, que visitamos durante un rato en la mañana de nuestro último día completo en JAPÓN. Fue un paseo agradable, y además pudimos observar algunas de las ceremonias de una boda tradicional japonesa. Como digo, lo que la UNESCO tiene calificado como PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD, no es sólo el MONTE FUJI, sino también diversos elementos del entorno, culturales y naturales, que ayudan a dar significado al lugar. Y este, al igual que los cinco lagos, es uno de ellos.
Tras comer algo, tomamos de nuevo el tren y nos dirigimos a la cercana ciudad de KAWAGUCHIKO, a orillas del lago KAWAGUCHI. Este lago es uno de los más visitados porque, con las condiciones climática y atmosféricas adecuadas, el MONTE FUJI puede verse reflejado en sus aguas. Pero como durante casi toda nuestra estancia en JAPÓN, si no había nubes, había una atmósfera brumosa. Y ligero viento rizaba las aguas del lago, impidiendo un reflejo nítido de cualquier objeto sobre las mismas.
Con estas condiciones, decidimos que lo más rentable desde el punto de vista del disfrute personal y visual será coger el funicular del MONTE KACHI KACHI (monte ficticio de los cuentos japoneses) que nos sube hasta las cercanías del MONTE TENJO a más de 1000 metros de altitud, y desde donde esperamos tener buenas vistas del MONTE FUJI. Serán las últimas horas de la tarde, ya que el último viaje de descenso del funicular es a las 17:20, y el sol se pone hacia las 17:35 - 17:40.
Lo que hacemos es subir con el funicular hasta su base superior, y luego hacer una ligera caminata hasta lo que creemos que es la cima del MONTE TENJO. Que como todos los carteles están japonés, cualquiera sabe. En cualquier caso, la tarde es agradable, y a pesar de la calima en la atmósfera que rodea al MONTE FUJI, podemos disfrutar de sus vistas.
Conforme la tarde pasa, aguantamos para bajar en el último viaje del funicular, ya que la temperatura y el tono de la luz es muy agradable para estar y hacer alguna fotografía. Finalmente vamos descendiendo, y en un tranquilo paseo nos dirigimos a la estación de KAWAGUCHIKO para coger el primero de los trenes que nos llevará hasta TOKIO en sucesivos transbordos. Pero incluso desde la crepuscular estación tenemos ocasión de echar una última mirada al majestuoso aunque tímido volcán.
La última vista del MONTE FUJI no la tendremos no obstante en este lugar. Me sorprenderá desde la ventanilla del avión que me trasladará desde el aeropuerto de NARITA hasta el de FRÁNCFORT, vista que creará una simpática complicidad con una todavía más simpática azafata japonesa de LUFTHANSA, y que hará que el largo vuelo sea mucho más agradable.
Si cuando llegué a KIOTO, lo de encontrarme con el ojo de pez y comprarlo fue un poco una casualidad, feliz casualidad desde mi punto de vista, en TOKIO sí que teníamos previsto algún rato, dependiendo de las circunstancias, para dedicarlo a las tiendas. Y he aquí que la mañana del 25 de septiembre salió gris y lluviosa. Así que quedamos a las doce en otro lado, y nos dividimos según nuestros interesantes para la cosa comercial. Y yo me quedé en SHINJUKU donde abundan las tiendas de fotografía, con material nuevo y también de segunda mano.
De segunda mano vi muchas cosas interesantes, y alguna de ellas a punto estuvo de venirse conmigo, y este artículo tendría un cariz muy distinto. Pero las circunstancias hicieron que no me decidiera por ninguna. Y así hasta que entre en MAP CAMERA. Disfruté mucho en el sótano de este comercio, donde encontramos marcas como LEICA, HASSELBLAD, ROLLEI, ZEISS, y una amplia colección de telemétricas de las marcas anteriores, pero también de marcas japonesas como CANON y NIKON. Lo que pasa es que los precios estaban un poco subiditos de tono para mis intenciones. Así que me dediqué a mirar otros pisos, con material moderno. Y la quinta planta está dedicada a las cámaras de objetivos intercambiables sin espejo. Y allí se me quedó mirando un PANASONIC LEICA DG SUMMILUX 15 MM F/1,7 ASPH. En concreto, este que aparece montado en mi OLYMPUS OM-D E-M5.
Yo ya disponía de un gran angular, un 14/2,5 también de PANASONIC que no está mal, pero que tiene algunos defectos que me empezaban a pesar. A saber... un bajo contraste a aperturas grandes, especialmente en contraluces, y demasiados artefactos de colorines en situaciones de fuerte contraste. Estos últimos se pueden corregir con facilidad. El problema del contraste a aperturas grandes, más difícilmente. Y es cierto que de nitidez no está mal, y que es extraordinariamente compacto. Pero estaba un escalón por debajo del resto del equipo.
El objetivo que me he traído de la capital japonesa es más grandote. Al fin y al cabo es un paso más luminoso. Es un objetivo diseñado por LEICA aunque fabricado en JAPÓN por PANASONIC para las cámaras micro cuatro tercios. Es metálico, incluido su generoso parasol. El enfoque automático es total y absolutamente silencioso y muy rápido. Dispone de selector de diafragmas en el barrilete, como veremos en la siguiente fotografía, aunque sólo es útil en las cámaras PANASONIC. En las OLYMPUS hay que ignorarlo y seleccionar el diafragma con la rueda del cuerpo de la cámara. Eso es una pena, porque probado con la PANASONIC LUMIX GF1 es una gozada ergonómicamente hablando. Y dispone de una generosa rueda de enfoque que permite la corrección manual cuando está en modo automático con gran facilidad.
Está claro que el objetivo está un par de escalones por encima del 14/2,5 en calidad. Y la cuestión es que con diversos descuentos, estaba a un precio que me sorprendió. Por lo bajo. Así que no lo dudé, y se ha venido conmigo. Aunque a partir de ese momento fue el angular de primera elección en lo que me quedaba de viaje, haciendo una pareja estupenda con el 45/1,8 de OLYMPUS. De hecho, algunos días fueron los dos únicos objetivos que usé, siendo absolutamente suficientes para mis propósitos de fotografía viajera.
Después de dos semanas sin esta sección, he reunido un buen grupo de recomendaciones, la mayor parte de la última semana, aunque algunas me llegaron de una forma u otra durante los días de mis vacaciones. Sigo acompañando esta entrada con fotografías de mi reciente viaje por JAPÓN. Y entre las recomendaciones que traigo, hay un par, empezaré con ellas, que las traigo por que me recuerdan aspectos del viaje que terminé hace unos días. Vamos con ello, que hay bastante de lo que comentar. Seré un poco telegráfico para no extenderme demasiado.
El japonés MAYUMI HOSOKURA, en su serie CRYSTAL LOVE STARLIGHT, reflexiona sobre el fenómeno del sexo y la sexualidad como un elemento de la sociedad de consuma japonesa. A mí también me llamaron la atención algunos aspectos de cómo afrontan la sexualidad en el país nipón.
MARIE-LAURE DUTEL también ha viajado por JAPÓN. Viendo sus fotografías, tengo la sensación de que hemos visto las mismas cosas, pero las hemos reflejado fotográficamente de formas muy distintas. Y eso está muy bien.
Parece ser que con el final del verano, unos cuantos clásicos están siendo expuestos en distintos lugares del mundo. Así que esto nos sirve como excusa para repasar sus obras.
Indudablemente, conviene conocer la elegancia de HORST a la hora de afrontar sus temas fotográficos, sea en blanco y negro o en color, sea del mundo de la moda y el cine, o en sus viajes o naturalezas muertas. Un fotógrafo de otra época pero que hay que conocer.
HERBERT LIST fue un fotógrafo alemán que hizo una gran carrera como fotógrafo de moda o trabajando para este tipo de revistas. Pero tiene una parte de su obra de carácter claramente surrealista, que se mueve entre lo macabro y la elegancia de su composición fotográfica. Otro clásico que hay que conocer.
Cuando termine de trabajar las fotografías de JAPÓN, desempolvaré la HASSELBLAD e intentaré plantearme un proyecto para trabajar con ella. Con una HASSELBLAD el fotógrafo ROLF BLOMBERG recorrió ECUADOR dejándonos un conjunto de fotografías realmente notables por su calidad estética y documental. Recomiendo echarles un vistazo.
NADAV KANDER ha realizado un trabajo de tres años de duración sobre las ciudades secretas de la antigua UNIÓN SOVIÉTICA, aquellas que nacieron como consecuencia de la guerra fría para el desarrollo del programa nuclear entre otras cosas, algunas de ellas cercanas a los desolados paisajes del arruinado MAR DE ARAL. Extraña la belleza de los lugares en ruina y decadencia.