Ayer domingo no me dio la vida para escribir mis habituales recomendaciones fotográficas de casi todos los domingos. He tenido un fin de semana raro, ocupado, aunque entretenido y agradable, habiendo de atender a diversos compromisos, que si no eran simultáneos, poco les faltaban. Compromisos es mucho decir, puesto que todos eran opciones de tiempo libre que podría haber elegido no hacer. Pero una vez que las eliges, se convierten en un compromiso. Uno de ellos fue el recorrido que realicé con un relativamente nutrido grupo de fotógrafos y aficionados a la fotografía por el barrio de Valdefierro de Zaragoza, para recorrer las obras de la edición de 2017 del Festival de Arte Urbano Asalto. De ahí proceden las fotografías que muestro en esta entrada.
Estas proceden de la pequeña Panasonic Lumix GM5, cámara digital que me llevé con el fin de obtener unas cuantas fotos de uso inmediato. Pero dentro de unos días empezarán a aparecer en mi cuenta de Instagram las Impossible Project en color que realice, u os contaré de los dos carretes de Fujifilm Superia XTra 400 que realicé con la Canon EOS 650. Sí, Impossible; todavía no he adquirido ni he llegado a la situación de utilizar una de las nuevas Polaroid Originals.
Siguiendo siempre un criterio más o menos cronológico, aunque sin que sea excesivamente preciso, empiezo hablando esta semana de la obra de Alfred Stieglitz, uno de los fotógrafos y teóricos de la fotografía que ha dado la historia de este medio de expresión en el siglo XX. Abanderó el abandono del pictorialismo y la búsqueda de modos de expresión propios para la fotografía, así como la entrada de la misma en los museos. En Lomography Magazine nos hablan de las diversas facetas de Stieglitz como fotógrafo y, en especial, de su faceta de fotógrafo surrealista. O al menos muy influenciado por esta corriente artística.
Stieglitz quien realizó la fotografía a La fuente, el famoso urinario puesto del revés de Marcel Duchamp, que epató al mundo del arte moderno en la segunda década del siglo XX. Paul Outerbridge fue otro importante fotógrafo que también vivió y se desarrolló como artista en ese entorno, relacionándose también con Duchamp y otros miembros de las vanguardias. También asumió la tarea de utilizar objetos cotidianos para expresar sus visiones estéticas, nos nutrió de unos retratos innovadores, y fue un pionero de la fotografía en color. Como punto de entrada para conocer su obra, os sugiero el artículo que hace unos días publico AnOther Magazine.
Y siguiendo con las primeras décadas del siglo, en ese ambiente surgió una bella modelo nacida en el estado de Nueva York, pero que tras su paso por el París de las vanguardias acabó convertida en una interesante fotógrafa. Hablo por supuesto de Lee Miller. En Lomography Magazine nos han hablado esta semana de su vertiente como fotógrafa de moda, que no dejó de practicar durante los días de la Segunda Guerra Mundial en los que permaneció en Londres. Antes de integrarse en una unidad militar hacia el final de la guerra y realizar alguna de sus fotografías más significativas en los últimos días del conflicto mundial en la Europa continental.
Y si antes he hablado de Outerbridge como pionero de la fotografía en color, en varias ocasiones he comentado en estas páginas la labor de Saul Leiter como impulsor de este tipo de fotografía, elevándola a un nivel artístico y expresivo notable. Para quien se quiera iniciar en la fotografía de Leiter, no puedo dejar de recomendar el artículo publicado recientemente por Oscar Colorado en sus páginas.
Damos un salto de unas décadas en el tiempo. Y nos encontramos con dos de los fotógrafos más personales de las últimas décadas del siglo XX, la norteamericana Nan Goldin y el japonés Nobuyoshi Araki. Ambos colaboraron unos años en la década de los años 90, durante los cuales Goldin pasó tiempo en Asia. Y de ahí surgió un trabajo conjunto Tokyo Love: Spring 1994, que reunió el trabajo de ambos. Debe ser bastante difícil de encontrar y de admirar. Nos han hablado de él en AnOther Magazine.
Nicholas Nixon también es un fotógrafo actual, pero que viene trabajando desde las últimas décadas del siglo XX, que he mencionado y comentado en diversas ocasiones en estas páginas. En ClavoArdiendo nos informan, como en otros medios nacionales, que está exponiendo en Madrid una amplia retrospectiva de su trabajo, con varias de sus más importantes y prolongadas series representadas. Sinceramente, espero tener la oportunidad de acercarme a visitar esta exposición. No sé ni cuando ni como, pero...
El British Journal of Photography viene realizando periódicamente la convocatoria Portrait of Britain, en la que se busca recoger una colección de retratos que representen a la sociedad británica de hoy en día. Una sociedad ciertamente compleja, como sabrá cualquiera que siga la actualidad sociopolítica del Reino Unido. La ganadora del certamen de este año ha sido la fotógrafa Sophie Harris-Taylor, con una fotografía de un grupo de hermanas. Pero ciertamente Harris-Taylor es una retratista notable que conviene conocer más allá del premio mencionado.
En el blog de Public Art Fund pudimos ver esta semana durante los recordatorios del aniversario del 11 de septiembre una fotografía de Agnes Denes sobre los campos de trigo en Manhattan. Este fue uno de los trabajos que más me han llamado la atención dentro del arte moderno conceptual. La plantación en las proximidades de Battery Park de un campo de trigo, que rompía conceptual y estéticamente con lo que conocemos y es el Bajo Manhattan. No puedo recordar con precisión donde conocí esta obra... en la visita a algún museo de arte moderno, pero que en estos momentos no consigo recordar, y me da pereza buscar. En cualquier caso, me ha parecido interesante como combinación de la fotografía con otras formas de expresión.
En Booooooom me ha llamado esta semana la minimalista obra de Theo Tagholm, un fotógrafo contemporáneo que juega con los juegos de geometrías y de detalles, incluso con la abstracción en los objetos más anodinos y cotidianos de las calles o lugares emblemáticos de las ciudades actuales.
En Cada día un fotógrafo nos han presentado la obra de Luther Gerlach, fotógrafo también contemporáneo, pero que basa su actividad en el uso prácticamente exclusivo de procesos fotográficos históricos desde hace tres décadas, especialmente aquellos utilizados en los primeras décadas de existencia de la técnica fotográfica. Os dejo un vídeo que nos habla un poco de su trabajo.
Hace unos días os hablé de un conjunto de fotógrafas japonesas que fueron recomendadas en LensCulture, de las que luego hice una selección personal de las que más me habían llamado la atención, y hoy voy a hablar de una de ellas en concreto. Se trata de Yukari Chikura (facebook), y aunque en el mencionado medio la trate como un talento emergente, lo cierto es que aunque joven, tiene ya un extenso cuerpo de obra con reportajes diversos y de gran calidad conceptual y estética. Sean las tradiciones de una fría región nipona, sean las condiciones de vida en las más tristes zonas de los genocidios en Camboya de hace unas décadas, sean los paisajes más conceptuales que la atan a su familia. Me gusta mucho esta fotógrafa.
Terminaremos hablando del collage, una técnica fotográfica que en los últimos años se realiza más de forma digital que a partir de las tradicionales tijeras y pegamento de antaño. Una técnica que siempre me ha atraído mucho, que se uso ampliamente durante la época de las vanguardias artísticas, que alguna vez he intentado con resultados muy pobres, lamentablemente,... y de la que podemos saber más a partir del artículo que le han dedicado en AnOther Magazine, y con el que me despido esta semana.
Esta semana he estado un poco parado, fotográficamente hablando. Mi principal intención esta semana era combinar la fotografía estenopeica con la infrarroja. Pero para eso necesitas un tiempo soleado, sin viento a ser posible, salvo efectos de movimiento buscados, y un paisaje adecuado. Pues bien, cuando he tenido disponibilidad para ello durante estos días, o ha soplado un viento de cuidado, o el sol ha estado ausente, como esta mañana de domingo. Aunque aún tengo alguna esperanza de que asome.
Menos mal que ayer por la tarde estuvimos visitando al atardecer el castillo de Zafra, en la provincia de Guadalajara en la comunidad de Castilla-La Mancha, muy cerquita del límite con la provincia de Teruel, en Aragón. Para posibles lectores de otros países, todo ello en España. Este castillo, muy sencillito, pero paisajísticamente muy bello, ha recibido cierta fama en los últimos tiempos por haber sido localización en algún episodio de la serie de televisión Game of Thrones, donde representó la Torre de la Alegría en Dorne en el tercer episodio de la sexta temporada. Llevé, como hago últimamente, una réflex con un carrete de película en color, cuyos resultados veremos cuando se revele; un cartucho de Impossible Project en blanco y negro con la Polaroid Image System SE, que pronto irá apareciendo en mi cuenta en Instagram; y la pequeña Leica D-Lux para tomar unas cuantas imágenes digitales para uso inmediato, y que he convertido a blanco y negro. Estas son las que aparecerán en esta entrada dominical.
Vamos a la prensa del corazón fotográfica. En el blog del International Center of Photography nos recordaron el 102º aniversario del nacimiento de Ingrid Bergman, que coincide con el 35º aniversario de su fallecimiento. Nació y murió el mismo día del año, un 29 de agosto. Y para ello qué mejor que mostrarnos las fotografías que Robert Capa le hizo en el rodaje de una película de Hitchcock, Notorious (Encadenados, en España), una de mis películas favoritas de todos los tiempos. Si me obligaran a realizar un top ten de mis películas favoritas, es muy posible que entrara ahí. En el mismo blog nos mostraron esta semana otro conjunto de fotografías de Capa, de las que ya os hablé hace un tiempo. Se trata de las que realizó en su viaje a la Unión Soviética en 1947 con John Steinbeck. El caso es que no es conocido por todo el mundo que Capa y la Bergman vivieron un notable romance, en el que la sueca incluso le pidió que se fuese con ella a Los Ángeles, con vistas a que ella se divorciase de su marido y se casasen. Pero Capa no era hombre de este tipo de compromisos. Su romance inspiró otra película de Hitchcock, Rear Window (La ventana indiscreta, en España). Del viaje a la Unión Soviética también nos han hablado esta semana en Magnum Photos.
Con mucha parsimonia traigo de vez en cuando alguna recomendación que obtengo del blog Absolution-V. Muestra buenas fotografías, así como interesantes fotogramas de cine. Pero desde mi punto de vista se centra más en el esteticismo que en el fondo de las fotografías, y eso le da con frecuencia un aire superficial. Pero hay excepciones. Y esta semana ha dedicado dos entradas al fotógrafo Fred Stein, la primera y la segunda. Uno de los múltiples refugiados alemanes que huyeron de su país en vísperas o durante la guerra para refugiarse en los EE.UU., en este caso por sus actividades anti-nazis, en Nueva York se convirtió en uno de los fotógrafos documentales con un sentido de la composición y de la estética más notables, siendo uno de mis preferidos en fotografía callejera. También es muy conocido por un retrato que realizó a Albert Einstein, otro alemán fuera de su país.
Hacía días que no traía aquí un fotógrafo, o fotógrafa en este caso, recomendado por Cada día un fotógrafo. En esta ocasión se trata de la sueca Åsa Sjiostrom, a la cual, por si fuera poco, sigo desde hace un tiempo en Instagram. Sjiostrom tiene una formación como periodista y vocación de cambiar el mundo tal y como lo conocemos. Y a pesar de vivir en un país del primerísimo mundo como es Suecia, basa su trabajo en mostrar cuáles son las situaciones de desigualdad y riesgo entre mujeres y niños. Tiene también no poca vocación etnográfica. A mí,... me gusta y me cae simpática.
En Booooooom aparecieron hace unos días las distintivas fotografías de la belga Annelie Vandendael. Al igual que muchos fotógrafos, su atención se centra en personas jóvenes. Adolescentes o poco más. Pero supera la rigidez germánica que aprecio en alguna otra fotógrafa de los países vecinos, como Rineke Dijkstra. Hay un tono juguetón, de falsa fotografía de moda, en esos retratos en los que rara vez veremos el rostro de la persona, sin que por ello quede despersonalizada. Y a pesar de los colores saturados y del aspecto de irrealidad, frente al abuso del retoque en la auténtica fotografía de moda, Vandendael trabaja con una Hasselblad de película tradicional, que procesa de acuerdo al efecto deseado.
Me traje hace un par de años de Viena una caja con facsímiles a escala de libros y unas cuantas láminas con fotografías de Alec Soth, que me gusta hojear de vez en cuando. Uno de los facsímiles corresponde al libro de su serie Sleeping By the Missippi, que en estos momentos nos informa desde varios lugares, entre ellos Dazed Magazine, se encuentra en revisión. El artículo de este medio se centra en el comentario de una de las fotografías, inicialmente títulada Mother and Daughter, Davenport, Iowa. Hoy conocemos lo que hay detrás de esta fotografía, realizada en 2002, una madre y una hija que trabajaban ambas en el mismo prostíbulo. Información que cambia por completo la forma en que nos acercamos a la fotografía. Interesante ejercicio siempre el de ver una fotografía con o sin pie de foto o título, y lo que nos condiciona este.
Hace tiempo que conocemos a Liu Bolin, artista chino que combina la performance con la fotografía. Su especialidad es pintar su cuerpo y sus ropas con los colores del entorno para luego hacerse las fotografías de forma que su persona pasa desapercibida, camuflada con el entorno. Ahora parece que ofrece esta idea a objetivos menos nobles que los de reflexionar sobre la despersonalización del ser humano, y ha aceptado aplicar su técnica a los paisajes islandeses para unas campañas publicitarias. Pero en esta ocasión no es el que hace sus propias fotos, y es nada menos que Annie Leibovitz quien se pone tras la cámara. Las fotografías son notables, pero mi sentimiento ante la iniciativa es, como mínimo, ambivalente. Traigo la noticia como se ha visto en Cross Connect y en The Fox is Black.
Un poquito menos frívolo es el trabajo que nos plantea Elizabeth Avedon en su blog. Se trata del titulado Ultima Thule del fotógrafo danés Henrik Saxgren. Tule o Thule es una isla o continente de carácter mítico para el mundo clásico grecorromano, que probablemente se identifica con las tierras escandinavas. Curiosamente, en algún momento dado, el concepto de tierra mítica nórdica fue adoptado posteriormente por los propios pueblos germánicos, tanto los más continentales como los escandinavos. Para quienes somos de una determinada generación nos suena por ser el lugar donde llegó a reinar Sigrid, la eterna novia del Capitán Trueno. Pues bien, en tiempos modernos se ha dado este nombre a Groenlandia, y más específicamente a la parte más septentrional e inhóspita de esta gran isla ártica. Incluso una base militar americana en este lugar recibió ese nombre. Y a esa perdida región ártica hace referencia el trabajo del fotógrafo danés que ha reflejado en fotografías de gran belleza el paisaje físico y humano de lugar. Saxgren tiene muchos otros trabajos previos, también con un tono etnográfico y viajero, muy interesantes.
Generalmente asociamos la fotografía de naturaleza a una fotografía espectacular, con colores saturados, de paisajes lujuriantes y animales magníficos. Pero de vez en cuando encontramos fotógrafos con acercamientos alternativos, como es el caso de Wayne Levin en Hawai, que se acerca a los cardúmenes de peces en las costas del archipiélago en mitad del Pacífico con una visión en blanco y negro, jugando con las luces y sombras, con la plasticidad de los cardúmenes y con la textura y los brillos de los peces. A mi me han gustado mucho, y lo hemos visto en Lenscratch.
Hace una semana os hablé de la entrada en LensCulture que hablaba de 12 fotógrafas japonesas jóvenes que había que seguir. En ese momento no había tenido tiempo de revisar sus trabajos. Me acabo de dar cuenta que de las doce acabé marcando siete de ellas. No voy a comentarlas en detalle. Os las menciono y enlace y a ver que os parecen.
Y antes de pasar al vídeo que he reservado para el final, hablaré del proyecto de un fotógrafo e informático zaragozano afincado en Japón, que trabaja en la industria del videojuego, y que me ha parecido muy interesante. Lo encontré en un twit de Mónica Giménez que citaba no me acuerdo quien, y el fotógrafo en cuestión es Alex Abian. Y el proyecto que he empezado a seguir es State of Tokyo. Como extranjero que es en una cultura distinta de la propia, Abian se confiesa fascinado por la gente y algunos de los lugares que encuentra en la enorme metrópolis que es Tokio. Y ha decidido usar su cámara y su palabra para contarnos sobre ellos, y me parecen unos artículos interesantísimos. No os los perdáis. También se puede seguir en Instagram.
Por último, os dejo un vídeo. ¿Uno más de los muchos que se pueden ver sobre el eclipse del pasado mes de agosto? Bueno... a mí este me ha parecido fenomenal. Grabado a 4K con un nivel de detalle fantástico, realizado con un equipo especializado, especialmente en lo que toca a la montura, nos permite ver con claridad las irregularidades del horizonte lunar, con sus montes y sus cráteres, generando las perlas de Baily, y contemplando las imponentes llamaradas de las eyecciones de masa coronal. Digno de verse.
Vamos a ver si esta semana normalizamos la redacción de mis recomendaciones semanales... que en las últimas semanas ha sido un caos. Aunque voy a intentar ser rápido para que me cunda la mañana.
De entrada, como en los últimos días mi actividad fotográfica ha estado centrado en la toma de imágenes con medios argénticos y no he "pisado" el laboratorio, no tengo novedades para acompañar la entrada. Así que la ilustraré con alguna foto de la ciudad que voy tomando con la pequeña cámara digital, la Panasonic Lumix GM5, que llevo siempre encima.
El pictorialismo no es mi estilo fotográfico favorito. Ya lo adelanto. Es difícil que aparezcan por aquí fotógrafos con un estilo pictorialista. Pero los autocromos de Mervyn O'Gorman a esa misteriosa adolescente que hemos dado en llamar "Christina", sea o no su hija, tienen algo que atraen poderosamente. Ya los he comentado en alguna ocasión. Pero hoy, dejaré enlazado un vídeo que alguien ha realizado y con el que se disfruta bastante de estas fotografías de hace más de 100 años. Apareció en Fotografía Creativa.
André Kertész es uno de los fotógrafos que más han marcado la forma de ver y fotografiar las calles y los hechos cotidianos, sin dejar de lado la belleza e incluso cierto grado de poesía. En International Center of Photography, con motivo del aniversario de su nacimiento, me han dado una excusa para recordarlo y recomendarlo.
Uno de mis libros favoritos es el que nos habla del viaje que realizó la fotógrafa Inge Morath en compañía de Henri Cartier-Bresson desde Nueva York a Reno, donde se estaba rodando la película The Misfits, la última película en la que trabajó Clark Gable, y la última película completa de Marilyn Monroe. Pero las fotografías de este viaje, tomadas por la fotógrafa austriaca, nos hablan de muchas muchas cosas, y son un verdadero tratado de cómo fotografiar al carretera. Nos lo han mostrado en Magnum Photos.
Es época de festivales, en diversos lugares del mundo. En Albedo Media nos cuentan que podemos disfrutar en Madrid en estos momentos de las fotografías de Minor White, un fotógrafo cuya obra reconozco que no he visitado con la frecuencia debida. Esto puede ser una buena excusa.
Hace casi dos años, tuve la ocasión de disfrutar en Viena de una estupenda retrospectiva de la obra de Joel Meyerowitz, y me traje algún libro de este magnífico fotógrafo. Ahora, en L'Oeil de la Photographie nos recomiendan que repasemos sus obras más tempranas, y yo les pienso hacer caso.
En el arte contemporáneo, el apropiacionismo es una práctica frecuente. Algunas veces, me da la impresión de que es puro morro por parte del artista que se aprovecha del trabajo de otros. Pero en otras ocasiones, el artista, como es el caso de Silin Liu (no encuentro presencia propia en la red), aporta no poco valor a fotografías que por otro lado entran dentro de la categoría de fotografías vernáculas, aquellas que se realizan sin un interés artístico específico. Incluso si en ellas aparecen personas conocidas, con las que la fotógrafa china se "retrata" postumamente. Nos lo han contado en L'Oeil de la Photographie.
Uno de los dogmas irracionales de ciertos grupos ecologistas y de izquierda es la demonización de la tecnología de los transgénicos. Como si la especie humana no llevase milenios alterando genéticamente los seres vivos que les son útiles. La ciencia y la tecnología no son buenas ni malas en sí mismas, pese a las líneas de pensamiento anticientíficas que han surgido con la posmodernidad. Pero sí que hay perversidad en las multinacionales que las utilizan para su propio interés con desprecio de otros seres humanos o del medio. Y una de las más peligrosas, por su oscurantismo, probablemente sea Monsanto. En L'Oeil de la Photographie nos cuentan como el frances Mathieu Asselin reflexiona fotográficamente sobre las catástrofes causadas por esta multinacional.
Está causando cierta expectación la exposición de Yolanda Dominguez en el Museo del Traje de Madrid. Su trabajo, "Little black dress" le sirve para poner en solfa los estereotipos acaptados o consagrados por las modas o las tendencias en lo que se refiere a la representación del cuerpo o el aspecto de la mujer. Me parece una iniciativa valiente. Nos han hablado de ella en Clavoardiendo Magazine, y no me importaría visitar la exposición. No sé si será posible... pero me gustaría.
Con el principio del mes nos llega un nuevo número de Fraction Magazine, el número 100, número redondo. En el que nos muestran cuatro porfolios distintos de los que nos tienen acostumbrados, saliéndose de su zona de confort. Porfolios muy coloridos, que tiran de técnicas mixtas en algunas ocasiones, y conceptualmente distintos. Os recomiendo echarle un vistazo detallado.
Y en Another Magazine nos hacen la propuesta de conocer a cinco fotógrafas, chicas, contemporáneas japonesas. Con estilos muy distintos pero que mezclan lo tradicional en el País del Sol Naciente con lo realmente innovador, y que además aportan su visión como mujeres. En un país donde el dominio masculino en todos los campos es todavía muy notable a pesar de su aparentemente elevado índice de desarrollo. Las fotógrafas son Hiromi Kakimoto, Tokyo Rumando, Mikiko Hara, Yukari Chikura y Akiko Takizawa. Mikiko Hara usa una vieja cámara de medio formato, relativamente sencilla, con la lente modificada para una mejor calidad, para sus notables retratos y paisajes. Me encanta.