Recomendaciones - del 11 al 18 de diciembre de 2016
Llegamos casi al final de año, y con una novedad anticipada ya en semanas pasadas. Ya no voy a elaborar más los tableros de Pinterest de la semana. Se me estaban acumulando muchos, más de sesenta, sin que sean prácticos una vez pasada la semana en que se recopilan. Por lo tanto, ahora tendré tableros temáticos, y todas las semanas os recomendaré uno. Desde que abrí la cuenta en Pinterest, y porque era una motivación que yo sentía entonces, abrí uno dedicado al bodegón y la naturaleza muerta, y ese es el que os dejo hoy como recomendación, porque es el más nutrido de los que tengo. Pero poco a poco habrá otros interesantes. Podéis visitar mi página en Pinterest para irlos viendo desde este mismo momento.
En cuanto a las fotografías de hoy, hace unas semanas os mostraba algunas fotografías digitalizadas a partir de copias en papel de unas vacaciones en París en el "acueducto" de la "inmaculada constitución" de diciembre de 1996. Entre ayer y hoy he estado revisando los negativos. A la espera de digitalizar alguno a alta resolución con la cámara y el objetivo macro, he hecho una digitalización previa con el escáner Epson Perfection Photo V600, para ir más rápido... o mejor dicho, para poder hacer otras cosas mientras se escaneaban. Forzando un poco la máquina, los he digitalizado a 2400 ppp, en el límite de lo razonable con este aparato (que está entre 1600 y 2400 píxeles por pulgada, siendo la mejor opción en calidad la de 1800 ppp, pero con unos archivos muy pequeños para formato pequeño de 24 x 36 mm). Con los 2400 ppp, se obtienen unos archivos de 6 megapíxeles, aunque es dudoso que la resolución del detalle fino sea mejor que con los 1800 ppp. Con esta resolución nos tenemos que conformar con 4 megapíxeles.
Visto en retrospectiva, a 20 años de distancia, aunque fue un viaje divertido del que guardo algún que otro recuerdo entrañable, la planificación fotográfica fue lamentable. Predominio de películas de 100 ISO, que con la niebla y carencia de luz obligaban a disparar con las aberturas máximas de los objetivos, que no son las mejores para vistas generales. Hice más fotografías en blanco y negro que en color, y si bien es cierto que tengo algunas razonablemente interesantes, la cosa podría haber sido mejor. Usé negativos Agfapan APX 100 y Kodak T-MAX 400, probablemente revelados con Agfa Rodinal. Ningún problema con los APX100, pero a los T-MAX 400 le sientan regular estos reveladores tradicionales, y hubiera sido mejor usar un revelador más moderno o dedicado. En cualquier caso, en la medida en que los negativos tienen buena densidad y tienen las sombras respetadas, los resultados son razonables.
Empezaremos las recomendaciones de la semana con las fotografías del británico Felice Beato, tal y como nos cuentan en ClavoArdiendo Magazine. Coincidiendo con la apertura de Japón al exterior en la era Meiji, también hubo un aumento del interés de Occidente por el País del Sol Naciente, especialmente por sus manifestaciones artísticas y culturales. Hubo un cierto movimiento de "orientalismo", que influyó en pintores modernos a partir del impresionismo. Beato abrió en 1863 un estudio fotográfico en Yokohama, ciudad que se encuentra en la misma bahía de Tokio, y allí permaneción durante 21 años. Su colección de fotografías de la época, muchas de las cuales fueron coloreadas por artistas contratados por el fotógrafo son un documento notable de una época y de una sociedad.
Otra historia relacionada con la fotografía y Japón que nos llega desde PetaPixel... este vídeo en Vimeo.
Se trata del testimonio de Russell Gackenbach, que viajando en un bombardero, "Necessary Evil", que acompañaba al "Enola Gay", capturó con su cámara privada un par de instantáneas de los primeros momentos de la explosión de la primera atómica detonada en una acción de guerra, sobre Hiroshima. Un hecho sobre el que pensado estos días viendo una serie de televisión sobre la que os hablaré dentro de unos días.
No faltan los testimonios gráficos de Andy Warhol y su Factory. No hace muchos años, en PhotoEspaña, pudimos disfrutar de una exposición sobre ese legendario estudio de ebullición cultural y social, cuyo libro catálogo compré. Un fotógrafo, entonces poco conocido, muy jovencito, en sus principios, que también documentó con sus fotografías lo que allí pasaba fue Stephen Shore, y en L'Oeil de la Photographie nos cuenta un poco sobre la cuestión.
Pero vayamos hablando un poco de fotografía más actual, contemporáneao. Inspired Eye es un sitio en internet dedicado a la fotografía documental en la calle que publican incluso una revista. Esta semana, en el boletín de noticias que nos manda habitualmente Olivier Duong, uno de los responsables del sitio, incluía un artículo sobre un fotógrafo aficionado, un piloto de avión que documenta sus viajes por el mundo, y cuyas fotografías, en blanco y negro me han parecido notables. El fotógrafo es David Manning.
Desconozco, no recuerdo vamos, de donde me llegó el conocimiento del fotógrafo valenciano Daniel Belenguer. Este es un fotógrafo valenciano que me parece interesante in sí mismo, y cuyo portfolio, con un tono fundamentalmente documental y etnográfico, merece la pena ser revisado. Pero es que además, publica un blog, Spain Images, que me ha parecido interesante como fuente de información. Entre los artículos que publica en el mismo están aquellos agrupados bajo la categoría Balas de plata, en los que habla de fotógrafos más que notables, y entiendo que lo hace sobre la base de que son fotógrafos todavía fieles en su totalidad o en parte a los haluros de plata, y de ahí el nombre de la serie. Me he suscrito, y no será de extrañar que traiga alguna recomendación de lo que Daniel proponga. Porque os hagáis una idea, en los últimos tiempos ha hablado de gente tan interesante como Adriana Lestido, Robert Adams, o Trent Parke.
Siguiendo con las tecnologías tradicionales, en L'Oeil de la Photographie, en su edición de los fines de semanas dedicada a las fotografías de los lectores, han publicado el trabajo de Mindaugas Gabrenas, fotógrafo aficionado lituano, que trabaja con cámaras que van desde las Hasselblad hasta las fabricadas caseramente por él mismo, con todas las "imperfecciones" que eso confiere a las imágenes. Aunque como muchos fotógrafos que optan por soluciones similares hace mucho blanco y negro, también se ha atrevido con el color, mucho más difícil de controlar con este tipo de aparatos. Y desde mi punto de vista, con éxito.
Y también es difícil la fotografía estenopeica en color. En Onfilm.photo han dedicado un artículo reciente a Nils Karlson (Flickr buscar entre los álbumes los dedicados a la fotografía estenopeica o "pinhole", porque también usa otras cámaras de medio formato para película tradicional). Este fotógrafo hace fotografía estenopeica pero sobre negativo. Y ha buscado la mejor tecnología posible ya que busca conseguir imágenes lo más precisas y nítidas posibles pero sin que quede lugar a dudas de que se trata de fotografía estenopeica. Lo cual lleva a la necesidad de conseguir estenopos lo más fino posibles, con números f muy altos, y muy regulares en sus contornos. Podéis juzgar a través de sus fotografías. A mí me gustaría conseguir algo parecido, pero con las que tengo, que tienen una número f de aproximadamente f/135, para negativos entre 6 x 6 cm y 6 x 12 cm, no consigo nunca el nivel de nitidez que me gustaría conseguir. Probablemnte tendría que conseguir un estenopo que me diera un f/256 o f/512.
Termino con un repaso a las fotografías de National Geographic, pero no a las que sus fotógrafos toman por todo el mundo, sino aquellas que son realizada dentro del país que vio nacer a esta sociedad, los Estados Unidos. Lo que me gustan de estas colecciones de fotografías, es que muchas de las fotos en color realizadas en los años 40, 50, o 60 usaron material sensible Kodachrome, que da unos colores tan característicos a las imágenes. Unos colores que, aunque se puedan simular hasta cierto punto con procesos digitales, no he visto fielmente reproducidos más que con el extinto material original. Nos hablaron de ello en L'Oeil de la Photographie.