Tras una semana de parón en mis recomendaciones semanales por viaje a Galicia, vuelvo a esta tradicional serie de artículos dominicales para comentar fotógrafos y fotografías que me han llamado la atención en las dos últimas semanas en este caso. Acompaño la entrada con algunas fotografías de una visita reciente a la rosaleda del Parque Grande de Zaragoza, con mi recientemente revisada en taller Pentax K-x armada principalmente con el SMC-A 100/4 Macro de la misma marca. Una combinación que me gusta usar de vez en cuando.
Nos llegó la noticia de la muerte de Rafael Sanz Lobato (1932 - 2015) a través de Guerra y Paz y otras fuentes. Hace apenas un año, disfrutábamos de una gran exposición retrospectiva en Zaragoza sobre su obra. En ella, aunque era su fotografía documental la que dominaba, la que realmente me produjo impacto fueron sus primorosas naturalezas muertas, realizadas con cámara de formato medio y una exquisita técnica de iluminación, sensitometría y laboratorio. Lo recordaremos con mucho cariño y admiración.
Desde Sales de Plata nos llega la noticia de la organización de sus microexposiciones. Pequeña exposiciones de fotógrafos que permanecen fieles a la película tradicional. Siendo en Madrid, sólo podría visitar alguna si coincide con alguno de mis eventuales viajes a la villa y corte. Pero la noticia de las mismas en su blog puede servir para que conozcamos mejor a estos fotógrafos, que nos pueden servir de inspiración. En estos momentos, exponen tres fotografías de 50 x 70 cm de Juan Fandiño realizadas en el barrio Nishinari de Osaka.
Siempre me ha gustado el aspecto cinematográfico de las fotografías de Todd Hido (Tumblr). Y ahora, L'Oeil de la Photographie nos trae una selección de ellas que se concentra en su modelo Khrystyna y en los paisajes nocturnos que dan un ambiente especial a lugares por otra parte banales, barrios residenciales de las ciudades americanas.
De un blog dedicado al camera porn, Tokyo camera style, me llega noticia de la fotógrafa japonesa Mikiko Hara. Hara tiene una técnica particularmente curiosa. Usa una vieja Ikonta 520/16, cámara de antes de la Segunda guerra mundial, a la que se le ha cambiado el objetivo por un Tessar más moderno. Yo tengo una cámara muy similar a esa, la Zeiss Ikon Ikonta 521/16, con el objetivo original, que no me he atrevido a usar con película negativa en color. Pero también tengo la Voigtländer Perkeo II, que tiene una concepción similar, pero con un objetivo similar al Tessar, que sí que produce buen resultado en color. Hara fotografía con su Ikonta modificada sin encuadrar, apuntando a su sujeto desde la altura de la cintura, con el objetivo previa mente enfocado por zonas, usando la escala de profundidad de campo. Sus resultados me parecen interesantes.
La depresión endógena es una de las enfermedades mentales. La tristeza más profunda, un sufrimiento psicológico de tremenda intensidad, sin causa aparente o desencadenante, que incluso lleva a quien la padece a desear la no existencia y a cometer suicidio. También supone un tremendo sufrimiento para las familias que conviven con estos enfermos. En American Photo, revista que parece que desaparece de su forma tradicional, nos cuentan y nos muestran ejemplos de cómo la fotógrafa Maureen Drennan usa la fotografía para lidiar con la depresión de su marido. Una mezcla de retratos y paisajes marinos, que yo he encontrado bastante interesante.
Elene Usdin es una fotógrafa francesa que usa el autorretrato (nada de estúpidos selfis, estamos hablando de fotografías muy pensadas y preparadas), para criticar de forma satírica la forma en que la mujere y el cuerpo de la mujer es considerado como un mero objeto en la sociedad actual. Nos lo cuenta en The British Journal of Photography. Y merece la pena repasar su amplio sitio en internet para conocer algo más de su obra.
Una fotografía de Noelle Swan Gilbert que apareció en el blog de Marc Peter Drolet, me lleva a repasar la serie The Edge of Innocence y otras series de la fotógrafa que se centran sobre todo en el mundo de la infancia y la adolescencia. Frecuentemente en el ámbito de su propia familia. Particularmente emotiva la serie dedicada a sus sobrinos, cuyo padre asesinó a su mujer, madre de los niños y hermana de la fotógrafa. Se centra en los niños y en la nostalgia; no se regodea en los morboso del caso.
También una bellísima y colorida naturaleza muerta vista en el blog de Marc Peter Drolet, me incita a conocer el trabajo de Drew Kelly. Pertenece a la serie Tenakee Time, en la que el fotógrafo se encuentra con personas que viven en Alaska fuera de los núcleos de población, a su aire, huyendo de los convencionalismos sociales. Pero tiene otras series muy interesantes, tanto de reportaje documental, como de paisajes. Incluso fotografía arquitectónica. Mucho para expolorar.
Lensblr es una iniciativa de agrupar fotógrafos, profesionales o aficionados, que presentan su trabajo en Tumblr, y en la medida de lo posible y de la calidad de su trabajo adquirir mayor visibilidad en la red. Yo apunté mi Tumblr De viaje con Carlos, y eventualmente alguna de mis modestas fotografías de viaje ha sido escogida para ser mostrada en el blog global de la iniciativa. En las últimas semanas han adoptado un nuevo proyecto que es The Lensblr Gallery, en el que cada semana presentan 10 obras de un fotógrafo seleccionado. Hace una semana, presentaron una muy interesante, pertenciente a Hawkeye39, un fotógrafo americano que vive en japón y recorre las calles de las ciudades con su moto y una cámara de fotos. Y que hace muy buenas fotos, eventualmente. Obsérvese este retrato robado en las calles, no sé si de Tokio.
Aunque por mis viajes de trabajo y otros líos he hecho un paréntesis en mis progresos hacia la naturaleza muerta y el bodegón, sigo recopilando información y ejemplos que me puedan servir de inspiración. Esta semana, desde aPhotoEditor, recojo las fotografías de setas y hongos de Stephen Kent Johnson, que me han gustado tanto por su composición como por su luz y color. Recorriendo su página web, vemos que tiene mucho más que ofrecer, tanto en el campo de la naturaleza muerta, como de la fotografía de interiores, como las aventuras de su cosmonauta en su trabajo más personal y menos comercial.
Vuelven mis recomendaciones fotográficas semanales a su día y su momento habitual, la mañana del domingo. Esta semana tenía una colección de marcadores muy diversa, que he ido reduciendo, con la sensación de que esta semana iba a quedar dedicada a lo anecdótico. Curiosamente, mi selección final tiene un aspecto mucho más interesante y con contenidos de nivel de lo que parecía al principio. Vosotros diréis. En cuanto a las fotografías acompañantes, fueron tomadas durante mis últimas vacaciones de semana santa en Vicenza, con la pequeña Voigtländer Perkeo II, formato medio de 6 x 6, con película Kodak Tri-X 400 expuesta a IE 250. Esta es una combinación que cada vez me gusta más. Por la polivalencia de la película, por que la cámara se lleva sin sentir en un bolsillo, y por que tras su denominación propia, el objetivo Color-Skopar esconde un Tessar que va realmente bien. Y además, he aprendido a obtener consistentemente 13 exposiciones por carrete de 120, en lugar de las 12 de rigor. Las fotografías corresponde a detalles de la Basílica Palladiana, junto con una imagen de callejera del corso Andrea Palladio.
La mayor parte de los retratos fotográficos que se realizaron en el siglo XX son de gente seria, circunspecta. En la mayor parte de las fotos que te hacen hoy en día te obligan a sonreír aunque no te apetezca... si no eres un soso, un sieso o cosas peores. Los "expertos" no se ponen de acuerdo en las razones de esas diferencias; que si la caries, que si las convenciones sociales, que si las largas exposiciones... Pero existen fotografías de gente decimonónica sonriente. Y en PetaPixel han recopilado unos cuantos ejemplos.
La fotografía comercial y del mundo de la publicidad me llama la atención sólo hasta cierto punto. Y no suele aparecer mucho por estas recomendaciones semanales. Pero en el "magazine" de Lomography nos muestran algunas de las fotografías que para anuncios publicitarios realizó William Helburn en los años 50 y 60. Y aparte que algunas me parecen muy modernas e incluso atrevidas, realmente transmiten una "joie de vivre" que te pone de buen humor. Y son estética y técnicamente impecables. En estas semanas en las que estamos despidiendo a los "mad men", me parecen de lo más adecuadas.
Hay muchos motivos que se me ocurren por los que opino que Sally Mann es una de las fotógrafas contemporáneas más interesantes. Pero su trabajo, especialmente el desarrollado durante los años ochenta con sus hijos en las épocas de vacación en la naturaleza del profundo sur, y en el que con frecuencia aparecía desnudos, ha sido objeto de fuertes controversias, especialmente por la intransigente actitud de los sectores más conservadores de la sociedad norteamericana. Yo soy de los que opino que si algo como el pecado existiera, estaría en la mayor parte de las ocasiones más en los ojos del que mira que en el objeto observado. Recientemente Mann ha publicado en The New York Times Magazine un extenso artículo hablando de aquellos duros momentos cuando se vio atacada por un trabajo realizado con amor y sobre los seres que más amaba o ama. Simultáneamente, The New York Times Magazine ha vuelto a publicar un artículo que comentaba en 1992 la inauguración de la exposición "Inmediate Family", que desató la controversia. Creo que es interesante leerlos. Están en inglés, lo siento. Y que cada cual saque sus consecuencias.
El último número de la revista francesa de fotografía Réponses Photo viene con una serie de artículos muy interesantes dedicados al autorretrato fotográfico. Diferenciando los que es un autorretrato, una obra que implica cierta reflexión e introspección sobre sí mismo, frente a la banalidad inherente al omnipresente selfi de los tiempos que corren. Casi coincidentemente, uno de los porfolios que esta semana ha publicado L'Oeil de la Photographie consiste en una selección de autorretratos de Melissa Shook realizados entre 1972 y 1973, autorretratos que admiten muchas lecturas tanto como reflexión íntima de la artista como en el mundo de la fotografía conceptual.
Detras del autorretrato suele haber una reflexión sobre el concepto de identidad. Y otros de los sujetos fotográficos que con frecuencia sirve también para reflexionar sobre este concepto son los gemelos idénticos. O no tan idénticos. En Feature Shoot nos muestran un conjunto de 42 retratos de gemélos de distintos fotógrafos, pero en los que se hace con frecuencia mucho más hincapié en las diferencias que en ese parecido que nos asombra, cuando normalmente tenemos asumido que somos seres únicos. Es algo cultural.
Introduciéndonos un poquito en el mundo del paisaje, en L'Oeil de la Photographie nos han traído la obra de Mathieu Bernard-Reymond. Con un aspecto más propio de la fotografía reposada y meditada del gran formato, son creaciones a partir de la fotografía y la creación digital, por lo que compone en ocasiones escenas que nos parecen normales pero que al mismo tiempo resultan imposibles. A mí me ha parecido muy interesante.
Más clásicos, pero al mismo tiempo alejados de los clichés, son los paisajes alpinos de Lauryn Ishak que nos muestran en Feature Shoot. Composiciones sencillas, que no simples, frecuentemente paisajes con figura, alejados de los chillones colores hipersaturados y el excesivo procesado digital que se está poniendo de moda a partir de algunos sitios para compartir fotografías, son paisajes que sirven simultáneamente como documentación y para transmitir un estado de ánimo, una impresión y una forma de percibir el mundo.
Aunque entre viajes y talleres de retrato tengo mis naturalezas en stand by, no quiero dejar de aportar una fuente más de inspiración sobre este tema. Viene desde Lens Culture, y el fotógrafo es Bob Cornelis, que con figuras geométricas y técnicas de fotografía tradicional de transferencia de imagen, trata de reproducir el concepto de karesansui, o los jardines de rocas propios del budismo zen sobre los que alguna que otra broma hicimos durante mi viaje a Japón hace unos meses. Por lo de sentarse a ver crecer las piedras... En cualquier caso, interesantes composiciones en los que se juega con las luces y sombras, las formas, y las texturas tanto de los objetos fotografaidos como del propio medio utilizado.
Adelanto un par de días mis recomendaciones semanales, de las que no hubo edición la semana pasada por estar de viaje, ya que el fin de semana estaré ocupado con otras actividades fotográficas. Ya os contaré. Como no ando con mucho tiempo. Será un poquito telegráfico. Las fotos de hoy, un viejo reportaje de un tren histórico, que un 10 de octubre de 2004, si no recuerdo mal, circuló entre Mora La Nueva y Caspe por la línea del antiguo directo entre Madrid y Barcelona.
En primer lugar, la edición del miércoles 8 de abril de 2015 de L'Oeil de la Photographie dedicó varios artículos a William Klein. Ni que decir tiene, que Klein es uno de los grandes de la fotografía documental, especialmente pateándose las calles de las grandes ciudades, aunque también ha incursionado en el terreno de la moda y otros géneros de forma muy interesante.
Ya que el viaje de la semana pasada fue por Italia, señalaremos dos fotógrafos italianos que han sido propuestos en los últimos días por Cada día un fotógrafo/Fotógrafos en la red:
Por un lado, el martes nos hablaron de Guido Guidi, un fotógrafo que me apareció también en una revista especializada en fotografía que compré para entretener el viaje de vuelta. Paisajes urbanos y arquitectura con cámara de gran formato. Me ha parecido muy interesante.
Después, este miércoles fue el napolitano Mimmo Jodice, un fotógrafo que ya me resulta conocido de otras ocasiones, y que también nos ofrece paisajes urbanos y naturales, así como otros géneros, con una visión en blanco y negro muy personal. Uno de los fotógrafos italianos que más me gustan de los que conozco.
Ya que estamos con los espacios urbanos, y si los ponemos en relación con la dimensión física del ser humano y su repercusión psicológica, en Lens Culture nos proponen el trabajo de Clarissa Bonet. Que nos muestra que hay muchas formas de acercase a la fotografía en la calle, sin necesidad de echarse encima de la persona ni invadir su espacio personal, desde el respeto, y al mismo tiempo transmitiéndonos una idea y una sensación. Jugando con las dimensiones, las luces y las sombras.
Empecé a conocer el trabajo de Nina Leen no hace mucho. Y estos días atrás nos han vuelto a hablar de ella en L'Oeil de la Photographie. Una más de las fotógrafas que abandonaron el viejo mundo para contemplar y fotografiar los Estados Unidos con una mirada especial, y que marcan la iconografía asociada a ese inmenso país. Fue una colaboradora habitual durante décadas de la revista Life.
Los ferrotipos fueron en su momento una técnica habitual de los fotógrafos callejeros, los minuteros que se instalaban en la plazas, en las ferias, en las fiestas públicas, para ofrecer un recuerdo a los viandantes y a los participantes. En PetaPixel nos muestran, y a mí me han encantado, los que ha realizado la fotógrafa Victoria Will, utilizando una cámara de gran formato y un equipo de iluminación actual, retratos de las gentes del cine que ha tomado durante el último festival de Sundance.
Finalmente, esta semana ha salido el número 73 de la revista en línea Fraction Magazine. En este número parece que han puesto especial énfasis en el fotógrafo como persona que a través de sus imágenes reflexiona sobre el significado, la historia y el devenir de entornos familiares y o habituales. Sea el hogar propio o de los padres, sea una comunidad rural o una ciudad, la atención a los detalles, incluso los pequeños detalles, nos puede dar las claves para entender mejor a las personas que conforman esas familias o esas comunidades, de donde vienen y hacia donde se encaminan. Me han llamado la atención la serie UMBRA de Julia Renée Jones, y la serie This land... de Melissa K. Stallar. También proponen una interesante exposición en línea colectiva bajo el tema Singularity (Singularidad). A mí me ha parecido interesante, aunque no de calidad homogénea.
No sé que he hecho esta semana. Me he encontrado con un montón de posibles recomendaciones guardadas para revisar. Justo en una mañana de domingo en la que tengo muchas cosas que hacer. Porque se acerca el momento de empezar a disfrutar de vacaciones, aunque sean pequeñas, y hacer algún viaje, aunque sea en forma de escapada de pocos días. Trataré de recoger lo mejor posible lo que he encontrado interesante, de forma rápida. Y os dejo con algunas fotografías con las que sigo mi aprendizaje del bodegón. He manejado el concepto de clave alta y luego estuve habilitando mi Hasselblad para ser utilizada con flash. Cables de sincronización y esas cosas... Pero vamos a lo importante.
En el blog If your leave, que nos va recomendado la obra de distintos artistas con ejemplos de sus obras, aparecieron este miércoles pasado algunos ejemplos de la obras del fotógrafo alemán Axel Hütte (entrevista y fotografías), especializado en paisajes, que desde hace tiempo me gustan mucho y que creo que me inspiran más que los chillones colorines que se nos proponen desde otros sitios. Creo que merece la pena conocer la obra de este fotógrafo.
En blanco y negro y con exposiciones de muy larga exposición, más una investigación del movimiento astronómico de los astros, David Shannon-Lier realiza paisajes en los que apreciamos el movimiento aparente de la luna por el firmamento conforme la Tierra va ejecutando su cotidiano giro sobre su eje, y además, con elementos naturales, ramas, piedras, caminos, laderas, nos indica el recorrido del astro cuando se oculte. Nos lo cuentan en Lens Culture. Y las fotografías están muy bien.
Si en una semana me aparecen dos artículos sobre Nobuyoshi Araki, y ni siquiera hablan de lo mismo, pienso que es momento de recordar a este prolífico y emblemático fotógrafo japonés. Un de los artículos ha aparecido en DSLR Magazine y el otro en American Suburb X. El primero hace referencia a su serie Ojo Shashu (Photography for the After Life), obra llena de color y simbolismo. El segundo se dirige hacia su obra en blanco y negro, sean sus naturalezas muertas, sean sus mujeres atadas con sogas al estilo japonés. El principal representante de su generación en Japón. Fotógrafo muy personal, y polémico por lo explícito y crudo de algunas de sus obras, creo que es de obligado conocimiento para todos los aficionados a la fotografía.
Nos introducimos ahora en el mundo del retrato. Y empezaremos por ponernos un poco nostálgicos, con las bellezas chinas de Nancy Sheung, una fotógrafa de Hong Kong que realizó buena parte de su obra hacia los años 60, en un tiempo en el que apenas se veían mujeres fotógrafas, y menos en aquella parte del mundo. En Urbanautica nos muestran algunas obras de la fotógrafa, relativamente ecléctica, pero con logros estéticos indudables, muy propios de la época.
En Lenscratch entrevistan y nos muestran el trabajo de Lori Vrba, con su serie The Moth Wing Diaries. Una obra muy personal, llena de melancolía, en su mirada hacia la infancia con su Hasselblad y su excelente procesado en blanco y negro.
Una imagen de Ramona Deckers, que me lleva a su página web, en gran parte dedicada a retratos de mujeres jóvenes, con cierta sensualidad difusa. Pero curiosamente lo que más me ha sabido a poco han sido sus fotografías en la carretera, que me han recordado algunas de las mejores tradiciones de la fotografía americana con esta perspectiva.
También nos ha mostrado un característico retrato de los que elabora el alemán Thomas Ruff. No obstante, este fotógrafo muy valorado, pero que ha mi me produce sentimientos encontrados, tiene una obra muy variada, afrontando diversos estilos y temas.
También con una obra basada en el desnudo y en la naturaleza muerta, desde Cada día un fotógrafo/Fotógrafos en la red, nos proponen la fotógrafa Brigitte Carnochan, una fotógrafa que utiliza las técnicas tradicionales, como las platinotipias o los coloreados a mano para ofrecernos una visión serena con un punto de melancolía de sus motivos.
Sin embargo, las naturalezas de Jennilee Marigomen, cuya referencia no puedo recordar donde apareció, están llenas de la fuerza del color vibrante y de las formas geométricas. También para quedarse un buen rato analizando las obras.
Esta semana me he encontrado con una enorme cantidad de marcadores con posibles entradas válidas para estas recomendaciones semanales. En el caso de haber incluido todas, esta hubiera sido la entrada interminable. Así que he tenido que adoptar una estrategia de eliminación. Al final, va a ser una entrada muy basada en la historia, la anécdota, o la impresión que me han producido fotografías concretas. Aparte de alguna que otra recomendación al estilo de siempre. Espero que os gusten.
Las fotografías acompañantes proceden de las jornadas de recreación histórica de las guerras napoleónicas en Zaragoza celebradas hace dos semanas, y a las que me fui con una cámara Kodak Pocket A-1 cargada con un carrete de 24 exposiciones Lomography Tiger CN200, película negativa color para formato 110. Fotografía festiva y sin complicaciones de ningún tipo, que no ha quedado mal. Mañana o pasado os cuento algunos aspectos técnicos de esta serie.
En primer lugar, un apunto histórico. Desde el Camera Lens Blog de Zeiss nos recuerda que esta semana ha sido el 125º aniversario del primer objetivo fotográfico que salió de la fábrica de Jena de la empresa. En concreto, un 21 de marzo de 1890. Se trataba de un objetivo Anastigmat, después conocido como Protar, un sencillo diseño casi simétrico de cuatro lentes en dos grupos. Después, la marca adquiriría fama merecida por algunas de sus creaciones, léase objetivos Tessar, Sonnar, Planar, Biogon, Distagon, Hologon... (enlaces a archivos pdf) que fueron ampliamente copiados por el resto de las marcas fotográficas hasta la saciedad. A mí me encanta el carácter de los sencillos Tessar (pdf), el ojo del águila como le llamaron en los primeros anuncios comerciales, con sus cuatro elementos en tres grupos, variantes del cual tengo en varias cámaras.
Hablando de cámaras y objetivos fotográficos, en el tumblr This is Sausage apareció esta semana un artículo con un autorretrato de Vivian Maier en el que muestra una cámara que no he conseguido identificar, con un objetivo bastante luminoso, y con un visor en ángulo recto muy curioso. Me tiene comida la moral la fotografía en cuestión. El tema está en que aunque a esta misteriosa fotógrafa y niñera se le asocia con sus Rolleiflex, utilizó una variedad notable de cámaras a lo largo de su vida. Y con ventaja. Seguiré buscando que cámara es la que aparece en ese autorretrato.
Esta ha sido semana de eclipse, pero no voy a hablar de las fotografía, miles de miles, que se han tomado durante la mañana (hora española) del 20 de marzo, cuando se produjo el último eclipse de sol. Pero ese evento fue la excusa para que en American Suburb X (ASX) nos mostraran la obra de Kikuji Kawada, The Last Cosmology. Fotografía en blanco y negro con fuerte componente conceptual, muy propia de la tradición japonesa, y sin duda interesante.
Si hay un oficio que es variado es el de fotógrafo. Yo no me considero fotógrafo, me considero aficionado a la fotografía, y dentro de esa afición me gusta hacer fotografías. Pero mi profesión, que me gusta, es otra. Además tengo la sensación que difícilmente me podría ganar tan bien la vida como fotógrafo. Salvo que fuera realmente muy muy muy bueno o extraordinariamente especializado. Recientemente leí un artículo sobre los ingresos medios de los fotógrafos profesionales en EE.UU. y eran realmente bajos. No creo que en nuestro país la cosa mejore, desde luego. El caso es que todavía hay situaciones más extremas, como la que nos cuentan en Petapixel sobre los fotógrafos de los muertos en el río Ganges, en India y Bangladés. Fotógrafos que muchas veces con un equipo básico de alguna compacta y poco más fotografían los cuerpos de los muertos listos para ser incinerados a orillas del Ganges. La fotografía post mortem o fotografía de difuntos no es una práctica extraordinaria. Durante el siglo XIX estuvo ampliamente difundida la práctica de tomar fotografías de los recientemente fallecidos, muchas veces en actitudes como si estuvieran posando con su familia, o en sus actividades cotidianas, las más discretas como si estuvieran durmiendo. Hay que tener en cuenta que en aquellos momentos hacerse una fotografía era algo caro, y fuera de la consideración de las clases más modestas, que la limitaban a guardar un último recuerdo del familiar fallecido. Esta práctica fue usada por Amenábar en The Others (Los otros) como elemento argumental.
"En ocasiones, fotografío muertos..."
Si nos ponemos macabros, en DSLR Magazine publicaron un interesante artículo el pasado miércoles sobre el escritor japonés Yukio Mishima. Y su relación con el fotógrafo Eikoh Hosoe (fotografías). Recordemos que Mishima murió de una forma extravagante. En 1970, con un grupo paramilitar que había formado, tomó una base militar tokiota para arengar a los soldados que había allí, que lo abuchearon y lo insultaron. Lo cual ocasionó que se suicidara con uno de los típicos rituales japoneses, mientras su ayudante lo decapitaba.
Algunas fotografías que me han llamado la atención y que me han inducido a conocer algo más de los fotógrafos que las tomaron:
También me llamó la atención este automóvil junto al mar, también en MPD, de Maude Arsenault. Luego, repasando la obra de la fotógrafa, me parece que tiene obras más conseguidas y personales y otras más a la moda de los usos actuales.
Una fotografía de Elina Brotherus que apareció en La beauté de Pandore me recordó que había visto varias referencias a esta fotógrafa y decidí dar una vuelta por su página web para conocer su obra. Uno tiene para un rato si quiere repasar todo lo que ofrece.
Una recomendación ahora que procede del mundo de la fotografía tradicional con película sensible. Nos llega desde Sales de Plata, y nos habla de la obra de Hisatomi Tadahiko (en Lens Culture). No es un fotógrafo muy conocido, pero su obra más personal, tomada con película tradicional en color tiene un carácter y una luminosidad muy interesantes.
A medio camino entre la naturaleza muerta y el retrato nos llega la obra de Kristen Hatgi Sink, que nos muestran un porfolio en las páginas de L'Oeil de la Photography. Naturalezas muertas invadidas por personas, o retratos invadidos por objetos, que con un magnífico colorido y luminosidad nos trasladan sin embargo una sensación profundamente inquietante.
Y terminaré con una noticia curiosa. Desde julio de 2014, el ministerio de cultura francés lanzó la iniciativa Tous photographes!, publicanda una carta de derechos, obligaciones y buenas prácticas para que los aficionados a la fotografía, los turistas y los visitantes en general de los museos y monumentos del patrimonio nacional francés pudieran realizar fotografías en los mismos. Una iniciativa que cuando yo la conocí en mi último viaje a París en diciembre me encantó. Y me gustaría que muchas otras instituciones, incluyendo las de mi país, claro está, copiaran descaradamente. Pero había algunas instituciones del patrimonio francés que se resistían a aplicarla, entre ellas el Museo de Orsay. Esto había dado lugar a movimientos para impulsar el cambio de actitud de los responsables de este emblemático museo, como la operación OrsayCommons. Pues bien, la inquieta revista francesa dedicada a la cultura Les InRockuptibles nos comunica que la ministra de Cultura francesa, Fleur Pellerin, tomó un fotografía en una visita al museo y la publicó en su instagram, lo cual ocasionó acusaciones de privilegio injustificado. Pero la ministra estuvo hábil. Se limitó a decir que se hablía limitado a aplicar la carta Tous photographes!. La consecuencia ha sido que el museo se ha bajado del carro y ha adoptado la iniciativa. Hay países en los que los actos de un ministro o una ministra pueden ser para beneficio de sus ciudadanos... Qué cosas... Eso sí, nada de flash, trípodes, monópies o paloselfis. Aunque esto me parece bien.