La fotografía como afición y otras artes visuales

CARLOSCARRETER.ES

Home / Essays / copenhagen

El 2016 en fotos (1): De viaje con la cámara al hombro

Comienzo como otros años con mi resumen y balance del año. El 2016 que se nos va, que como muchos años ha tenido sus cosas buenas y sus no tan buenas. Pero mi recuerdo de los años siempre lo expreso en forma de fotografías, que muchas veces llevan asociadas recuerdos. Y también muchas veces, esos recuerdos pueden ser íntimos o privados, aunque las fotografías que los representan sean públicas. Soy celoso guardián de mi intimidad, mis recuerdos más próximos son míos. Pero hay imágenes próximas que los representan y puedo y quiero publicar. Y como digo, empiezo el balance con los viajes.

No me quejo. En absoluto. Ha sido un buen año en lo que se refiere a los viajes de larga distancia y recorrido, con algún incidente, pero sin mayores consecuencias. Sin embargo, siento que no he podido aprovechar tanto en miniviajes, esas escapadas de un día o un fin de semana, que también son muy necesarias, y a las que he tenido que renunciar durante el año en varias ocasiones, por motivos diversos. Lo dicho, celoso guardián de mi privacidad.

Tras los dos primeros meses, en los que se puso de manifiesto que iba a ser un año raro y complicado para las excursiones y escapadas de fin de semana, un sábado por la mañana de marzo hubo una pequeña excursión de Fotógraf@s en Zaragoza a Anento. Fue como un punto de partida. Por sencillo que fuera.

Aguallueve de Anento, Aragón (España).

Pocas semanas más tarde llegaba mi primer viaje internacional del año. Ya se ha convertido en un clásico mi escapada a Italia de Semana Santa, que este año, por mor de unos festivos que se nos debían, se estiró algo más. Y el destino fue las ciudades de la Umbria y el sur de la Toscana. Lugares de gran belleza, física y cultural, y que además carecen de las aglomeraciones de otros destinos más afamados en la península itálica.

Vista de Perugia al anochecer.
Estación de Asís tras un cansado día de recorrer sus alrededores y sus calles.
Enamorados quedamos de la ciudad medieval de Gubbio, en un día frío pero bello.
Tomando unos cafés y el sol en la Piazza Grande de Arezzo.
El sol comienza a descender en la tarde de Cortona.
Interior del impresionante duomo de Orvieto.

Vuelta tras las vacaciones de Semana Santa a los fines de semana gafados hasta que a principios de junio consigo escaparme un sábado a Madrid para visitar algunas de las más destacadas exposiciones en PhotoEspaña 2016.

Buscando donde refrescarnos en un día de calor moderado en Madrid.

También con el comienzo de la primera mitad de mis vacaciones de verano pude escaparme con Fotógraf@s en Zaragoza al valle de Tena y Jaca, en una excursión muy divertida.

Pantano de Búbal con Peña Telera de fondo.

Y llega el viaje estrella del año. Islandia era un destino deseado desde hacía muchos años. Aunque siempre habían surgido problemas para hacer realidad el deseo. Incluso este año estos problemas surgieron hasta la misma víspera del viaje, pero mi decisión era clara y al final aterricé en la bella isla cercana al ártico, y a caballo de dos placas continentales. Difícil resumir la variedad de paisajes y estímulos visuales de esos días.

Emanaciones geotermales.
Harpa en Reikiavik.
El Geisyr que da nombre a todos los géiseres... o uno vecino.
Paisajes entre lo agreste y la llanura.
Mil y un salto de aguas.
Las imponentes masas de hielo de los glaciares.
Playas de negra arena y aguas batidas por el viento.
Grandes extensiones de cenizas arrastradas por las aguas en apocalípticas catástrofes geológicas.
Navegando entre los icebergs en las lagunas glaciares.
O paseando por la playa entre bloques de hielo.

En julio, aprovechando todavía algunos días de vacaciones, aprovecho otro día para volver a visitar algunas exposiciones más de la interesante edición 2016 de PhotoEspaña. Y la exposición del Bosco en el Prado. Esta vez con visita a lugares poco conocidos del Jardín Botánico de Madrid.

En agosto me proponen visitar el sur de Suecia, quizá Copenhague, y si hay suerte Estocolmo. Voy de acompañante en un viaje... llamémoslo de negocios,... pero que me permitió conocer mucho del arte moderno y contemporáneo en aquellas tierras escandinavas. Y los tres lugares nos dio tiempo a visitar.

Pirámide de madera en Lousiana, museo de arte moderno cerca de Conpenhague.
Volks Wagen Beetle deconstruido en la Konsthall de Malmo.
Cenando al atardecer en Fotografiska de Estocolmo.
En una de las salas infinitas de Yayoi Kusama en el Moderna Museet de Estocolmo.
Y una premonitoria foto final en Estocolmo, junto al ayuntamiento, de lo que iba a ser mi futuro viajero.

Septiembre fue saludado con una nueva escapada con Fotógraf@s en Zaragoza, que han sido los que me han permitido escapar en parte a mi maldición de las excursiones de este año. En esta ocasión, una divertida excursión a la comarca del Matarraña en la provincia de Teruel.

Accediendo al casco histórico de Valderrobres, Aragón (España)

Y con la segunda mitad de mis vacaciones, entrado ya el otoño a principios de octubre, surge un viaje relativamente inesperado, y que va a resultar también un éxito, rico en experiencias y visualmente muy interesante. Nos vamos a Hong Kong. Y desde la antigua colonia inglesa en China, me escaparé también a visitar Macao. También difícil de resumir visualmente las experiencias de esa semana.

Ladies Market en Mongkok.
Templo de los Diez mil Budas en Sha Tin.
Tranvías bajo la lluvia en Causeway Bay.
Monasterio Po Lin en la isla de Lantau.
Pescadora en Tai O, isla de Lantau.
Jardines Nan Lian.
Jardín de los Pájaros en la calle Yuen Po.
El ocaso en Victoria Harbour.
Una mañana por Central Hong Kong y el SOHO.
Hong Kong desde The Peak.
Contraste entre lo moderno y lo antiguo en Macao.
A la salid de la casa del Mandarín en Macao.

Octubre fue también la ocasión de compartir una día de intensa fotografía con unos estupendos colegas, esta vez de ASAFONA (Asociación aragonesa de fotógrafos de naturaleza), a la que me apunté a principio de año, y que no he aprovechado ni la cuarta parte de lo que pensaba. Me voy a dar otro año de oportunidad, a ver cómo funciona. En esta ocasión, fotografiando la flor del azafrán en Monreal del Campo, provincia de Teruel.

Y en noviembre, organizamos una quedada de amigos diversos en Madrid, con la excusa de la exposición de Renoir en el Thyssen-Bornemisza. A pesar de la lluvia, lo pasamos bien.

Roy Lichstenstein admirado por un visitante asiático en el Museo Thyssen-Bornemisza.

Cerraremos el año con una escapada cercana a fotografiar el viaducto de alta velocidad de Rodén, en un mes de diciembre en el que también se han frustrado un por de excursiones por el mundo... Esperemos que esto mejore en 2017.

Es la única fotografía que he puesto realizada con una cámara de película en este resumen viajero, pero mañana lo compenso.

El 2014 en fotos (1): De viaje con la cámara al hombro

No ha sido un año fácil para viajar. De hecho, ha habido sobresaltos en alguno de mis viajes. Pero ha sido un buen año y productivo. Quizá con el hito más importante el del viaje a JAPÓN, un par de veces aplazado por distintos motivos, y que este año, aunque con miedo, nos decidimos a hacer y disfrutar.

Pero ha habido más cosas. Tanto en viajes al extranjero, como moviéndonos en cercanías. Os lo cuento como es tradicional con fotografías.

Varias excursiones con Fotógraf@s en Zaragoza; la primera al Monasterio de Rueda y las saladas de Sástago. Y frecuentemente me he llevado alguna cámara de película tradicional. Paisaje del río Ebro en Escatrón,
Durante todo el año he estado montando un equipo de formato medio Hasselblad. Probé el sistema por primera vez en las trincheras de Alcubierre.
Nueva salida con Fotógraf@s en Zaragoza; en esta ocasión a Uncastillo.
El viaje a Italia en Semana Santa empieza a ser una tradición. Disfrutando de Riomaggiore, en la costa de las Cinque Terre.
Un lugar no carente de magia es el cementerio de Staglieno en Génova.
Y desde Génova, un viaje relámpago a Florencia, a disfrutar del sol de la Pasquetta a orillas del Arno.
No es mi primera visita al yacimiento arqueológico de los Bañales. Y en ambas he llevado una cámara de formato medio para película tradicional.
Otro día, a finales de primavera, por las Cinco Villas, cerca de Erla, también con un carrete de película en blanco y negro.
Nuevamente de excursión con Fotógraf@s en Zaragoza; en esta ocasión mezcla de historia y naturaleza en el Monasterio de San Juan de la Peña.
En verano a Suecia y Copenhague, con base en Malmo.
En Copenhague, visité por primera vez el notable museo de arte contemporáneo Louisiana.
El viaje por Suecia se vio interrumpido por problemas familiares. El último lugar visitado fue el casco histórico de Ystad.
La excursión de enero a las saladas de Sástago-Bujaraloz me dejó con ganas de más, así que una tarde de verano con tormenta me acerqué de nuevo.
El viaje a Japón estuvo pendiente de un hilo por lo problemas familiares hasta pocas semanas antes. Pero al final pude disfrutar de lugares como Fushimi Inari Taisha en Kioto.
También disfrutamos de una tarde casi perfecta en Kasuga Taisha en la ciudad de Nara.
El populoso cruce de Shibuya en Tokio bajo la lluvia.
Paseando entre los lugares sagrados de Tosho-gu en Nikko.
Desde mi infancia quise ver con mis propios ojos al Daibutsu de Kamakura; deseo cumplido.
Y un viaje a Japón no puede estar completo si el Monte Fuji.
La alegría del viaje a Japón se vio ensombrecida por la melancolía de las semanas siguientes, paliada en parte por una escapada a Córdoba, donde no faltó la visita a la mezquita-catedral.
Una cierta melancolía acompañó mi escapada a Madrid; típica alpargatería y cordelería en la Calle de Toledo.
Un tono más alegre tuvo la excursión familiar a Barcelona unas semanas más tarde, con visita al acuario incluida.
La guinda a los viajes del año la puso mi visita a París en diciembre; por primera vez visité el Museo Rodin. Debería haberlo hecho antes.
En París tuve el tiempo gris propio de finales de otoño; aunque con excepciones, como la hermosa puesta de sol que me sorprendió en el Centro George Pompidou.
Y a París me acompañó también una cámara de película tradicional, y con esta vista del Sena, el puente de Jena y la Torre Eiffel me despido hasta próximos viajes. Feliz año 2015 viajero.

Jazz en la calle en Copenhague

Ya habían pasado las primeras horas de la tarde cuando tomamos un tren en dirección a COPENHAGUE, con intención de pasar allí la tarde. Se nos indica que nos bajemos en la estación de VESTERPORT, para tomar una cervezas en una agradable terraza a orillas del puerto.

Quien me iba a decir que nuestro camino iba a pasar justo por delante de la famosa SIRENITA, monumentillo al que siempre había pensado que había que ir a propósito, que no estaba camino de ninguna parte. Bueno, pues eso. Y que la tarde, aunque con nubes, estaba agradable, con una temperatura templada para pasear un rato por la bonita capital danesa.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA

De allí, cuando se acercaba una hora adecuada, nos llegamos NYPORT, el encantador lugar con su canal, sus barquitos, sus casas de colores y sus miles de turistas tomándose sus cervezas, sus copas, sus cenas o simplemente curioseando.

Por las fechas, sabíamos que estaría en su apogeo el festival internacional de Jazz que se celebra todos los años para estas fechas. Y aunque no habíamos tenido ocasión de preparar el asistir a algún concierto de primer nivel, seguro que íbamos a encontrar conciertos de grupos aficionados en la calle. Y NYPORT es un lugar donde siempre ponen algún escenario. En esta ocasión nos encontramos con la actuación de la GREAT DANES BIG BAND.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA

Nuestro veredicto, más o menos unánime, es que como conjunto no siempre iban todo lo armonizados que deberían, pero que algunos de sus solos estaban muy bien. Su repertorio no era de temas clásicos de las más famosas big bands americanas, sino que llevaban temas de corte más moderno y arriesgado lo cual es de agradecer.

Claro que eso conlleva que el público no se congregue con tanto interés como cuando todo les suena conocido. También hay que decir que el público en sí mismo forma parte del espectáculo. Así como la gente que deambulaba por NYPORT en el descanso de la actuación, que aprovechamos para comernos unas clásicas salchichas danesas.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA

Tras la actuación decidimos ir caminando poco a poco, paseando, en el entorno de la populosa STRØGET, donde seguramente encontraríamos algunas otras actuaciones jazzísticas.

Algunas, aunque al aire libre, tenían un carácter privado ya que estaba orientadas a los clientes de determinadas terrazas de restaurantes, aunque se podían escuchar bien por toda el lugar. Verse se veían peor.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA

Y otras, sin embargo, como un sexteto que encontramos en HØJBRO PLADS, eran también actuaciones públicas. Alguno de los músicos de este sexteto, cuyo nombre no recogí, me sonaban de haberlos oído y fotografiado hace unos años. En cualquier caso, sonaban realmente bien, y era bonito verlos tocar iluminados delante de la silueta del CHRISTIANSBORG SLOT, sede del gobierno, el parlamento y el poder judicial daneses.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA
OLYMPUS DIGITAL CAMERA